Vecinos y comerciantes de Ocumare de la Costa aseguraron que todo está bajo control nuevamente en la zona costera, luego de registrase fuertes precipitaciones en la tarde de este martes, que causaron el desbordamiento de ríos y quebrada locales.
Este rápido retorno a la normalidad fue notorio en la alcabala de El Limón, donde los funcionarios ratificaron que no habían recibido ningún tipo de novedades en esta arteria vial de montaña.
«No hubo ningún percance ni ayer por las lluvias ni hoy en la mañana», aseguró la fuente castrense, notándose pocos vehículos que transitaban por la referida alcabala.
Por su parte, Briceida Arias, fiscal de varias líneas de transporte público que cubren la ruta de Ocumare de la Costa desde el Terminal Central de Maracay, confirmó la información facilitada por los funcionarios de seguridad y destacó que las unidades han hecho el recorrido sin novedad.
«La carretera de Ocumare de la Costa está totalmente abierta, ayer (martes) estuvo totalmente normal», aseveró.
Arias igualmente comentó que no se reportaron obstrucciones en la vía, a pesar de las fuertes precipitaciones que cayeron en la tarde del martes y este miércoles; «no hubo árboles caídos o piedras atravesadas, gracias a Dios tenemos una carretera viable para que vayan a visitar las costas», sentenció.
CRECIDA DEL RÍO CATA
En este contexto, la fiscal de la ruta de Ocumare-Choroní hizo referencia a las versiones de los residentes sobre las afectaciones en Cata; sin embargo, aseveró que esta situación no tuvo repercusiones negativas en la zona turística; «a algunos residentes de las costas sé se les metió el agua y el barro a sus casas, más no hubo mayores daños», precisó.
Del mismo modo, Normalia Dávila, comerciante de Ocumare de la Costa, relató que gracias al esfuerzo de las autoridades locales, la situación estuvo bajo control; «de acuerdo a algunos habitantes de Bahía de Cata, ya había bajado el agua. Sí se anegaron algunas viviendas por el desbordamiento del río, y la carretera está en las mismas condiciones, no tuvo ninguna afectación», comentó.
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Hasta el cierre de esta edición, ningún vocero de la alcaldía del municipio Costa de Oro había ofrecido un reporte oficial. Sin embargo, extraoficialmente se conoció que al menos 16 viviendas se vieron afectadas por la crecida del río de Cata.
LINO HIDALGO | elsiglo
