Como Pastor Rafael Zamora, de 53 años de edad, padre de dos hijos y de oficio microempresario en la población de Magdaleno, fue identificado el ciudadano que falleció en un accidente de tránsito en la modalidad de arrollamiento en la carretera nacional entre Cagua y la Encrucijada de Turmero.
Luis Olivo, hermano, señaló que el accidente ocurrió, de acuerdo a la información que le facilitaron, el viernes pasado a eso de las 6:00 de la mañana.
“Me indicaron las autoridades de Tránsito Terrestre que mi hermano había muerto en un arrollamiento el viernes 14 de junio, cuando él se encontraba desaparecido desde el viernes 7 de junio“, expresó el denunciante.
Dijo que Pastor Zamora tiene un negocio de carpintería en la población de Magdaleno. Allí fabricaba sus muebles, comedores, sillas, camas y otros instrumentos del hogar. Además ejercía las funciones de tapicero. Se ganaba la vida de manera honrada y generando asimismo algunos puestos de trabajo en la referida población artesanal del municipio Zamora.
El viernes 7 de junio luego de cumplir con sus obligaciones, cerró el negocio y se dirigió a la parada para tomar un transporte público que lo dejaría en la avenida Generalísimo Francisco de Miranda, en Santa Rita. Eso habría ocurrido a las 5:00 de la tarde, dijo.
“Mi hermano residía en la vereda 5, casa número 130 en el sector Fuerzas de Aragua, y lamentablemente ese día no llegó a su residencia, en donde lo esperaban sus hijos y la mujer”, comentó.
Con el pasar de las horas, “sus familiares comenzamos a buscarlo por los comandos policiales, subdelegaciones del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas, sedes de los comandos de la Guardia Nacional y de las Policías Municipales para cerciorarnos si es que estaba preso o qué..“, agregó.
“También acudimos a los centros asistenciales, pero nadie daba información sobre su paradero, y ocho días después apareció muerto en un accidente vial ocurrido cerca de la Encrucijada de Turmero”, expresó el denunciante.
“Y durante ese tiempo, dónde estuvo metido mi hermano”, afirmó el señor Olivo. “Pastor era una persona que no acostumbraba ausentarse del hogar en tales circunstancias y siempre se comunicaba con la familia”, añadió el denunciante.
“Su único defecto en la vida era que le gustaba ingerir licor, y presumo que mi hermano no era ningún loco”, dijo.
Señaló que él fungía como administrador del negocio de los muebles y ahora que está de moda en los pueblos el pago de “vacunas”, sospecho que mi hermano se negó a contribuir con la “causa” como dicen los maladros y posteriormente lo secuestraron.
Para librarse de culpas ante el Cicpc y los tribunales del país, los individuos lo habrían arrojado de un vehículo en marcha en ese tramo vial y unos carros que venían detrás de la unidad, le pasaron sobre su cuerpo causándole la muerte.
Aclaró, “no estoy asegurando que eso fue así sino que es mi presunción y en aras de aclarar las circunstancias de la muerte de mi hermano, el caso será denunciado en la División Regional de Homicidios Aragua. Espero que los funcionarios investiguen y se digan las causas verdaderas de la muerte de Pastor Rafael Zamora.
LUIS ANTONIO QUINTERO | elsiglo
foto | FAUSTINO PÉREZ
