Aunque hoy en día dispongamos de métodos barrera que previenen las enfermedades de transmisión sexual (ETS), su uso no está tan asentado en la sociedad como debería.
El Instituto Catalán de la Salud (ICS) detectó que en España había aumentado el diagnóstico de ETS en un 56% en los últimos dos años, datos que deberían resultar todo lo contrario, puesto que la compra de condones y el acceso a la información es más fácil que nunca.
Así, tres adolescentes (sí, adolescentes) de la academia Isaac Newton de Londres inventaron unos condones, llamados ‘S.T. Eye’, que cambiaban de color si entraban en contacto con una ETS. Este proceso se da gracias a unos anticuerpos añadidos al látex que reaccionan en presencia de bacterias de fluidos infectados (clamidia, herpes, sífilis, gonorrea…).
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Los condones reaccionarán y resultará mucho más fácil saber si padecemos una ETS, así como poder proteger la salud sexual de la pareja.
Todavía no están a la venta, pero deseamos que este sea el futuro de los condones. Y también que tomemos más conciencia sobre la importancia de su uso.
