Los mapas digitales pueden dar información falsa

Hoy en día las personas cuentan con los mapas digitales, teóricamente los más precisos, sin embargo estos también pueden dar direcciones equivocadas.

A finales de agosto por ejemplo, los usuarios de Snapchat en Estados Unidos comprobaron que su aplicación de mapas había renombrado a Nueva York, bautizándola con la expresión antisemita “Jewtropolis” (Judiotrópolis).

En Washington, Google Maps le cambió el nombre a un edificio del Senado tras la reciente muerte del senador John McCain. Y los investigadores han descubierto numerosas referencias falsas a hoteles y plomeros en Google Maps, aparentes intentos de manipular las búsquedas en inflar el tráfico o dirigirlo a sitios específicos.

Los mapas modernos son capaces de ubicar monumentos y atracciones, negocios y restaurantes, indicar dónde hay tráfico pesado y dar direcciones para llegar a un sitio.

Por otra parte hay otro elemento importante: la información que suministran algunos usuarios, que hace que los mapas se parezcan a Wikipedia, donde todo el mundo puede poner lo que desee.