El Mercado Libre de Maracay, municipio Girardot, ha pasado por distintos problemas con la afluencia de clientes, sobre todo después de la pandemia, afectando así a uno de los rubros que en la comida son bastante solicitados como lo son los condimentos.
Anteriormente, las personas que iban a comprar a este mercado buscaban bastante los condimentos, siendo famosos por la calidad y frescura, que en la actualidad también se mantienen, pero las ventas han decaído bastante.
Esta situación ha afectado a muchos comerciantes de la zona. Una de las problemáticas y la principal, es el poder adquisitivo de los aragüeños, ya que la situación económica que presenta el país es crítica en muchos aspectos, lo que obliga a las personas a comprar estrictamente lo necesario, que es para lo que les alcanza.
Sin embargo, también hay otros problemas, se trata del deterioro de la infraestructura del mercado, misma que los comerciantes de distintos rubros se han quejado en reiteradas ocasiones, ya que esto ahuyenta a los clientes.
«La gente sí compra variedad, pero es muy poca la afluencia de clientes que entra al Mercado Libre», destacó Marbella Cárdenas, comerciante de condimentos.
Los productos que más se venden en materia de condimentos, son el cubito, el adobo y el comino, que son los más utilizados en las comidas, siendo los más básicos.
Pero no llevan en grandes cantidades como se acostumbraba antes, sino que compran de a poquito, que le pueden alcanzar a dos o tres días, o cuando mucho a una semana.
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Competencia en las ventas de de condimentos
Otro de los problemas que se manejan es que no tienen ventas competitivas respecto a los demás locales ubicados en el centro de la ciudad, ya que se pueden conseguir mucho más baratos.
«En el centro han creado nuevos negocios y venden más económico porque ellos compran al mayor y nosotros compramos lo suficiente para pasar un fin de semana», manifestó Florencio Mendoza, también vendedor.
A pesar de esto, los días más concurridos siguen siendo los fines de semana, que es cuando las personas que trabajan en empresas tienen tiempo libre para hacer mercado, aunque ya no compren igual.
«Vamos a decir, gracias a Dios, pero las ventas están un poquito flojas. Siempre esperamos el sábado y domingo que hay un poquito más movimiento», especificó Hallem Salak, comerciante.
Finalmente, destacaron que hay un montón de sugerencias que tienen los vendedores de distintos rubros que hacen vida en el mercado, que pueden verse aplicadas a mejorar las ventas y la afluencia, para beneficio colectivo.
ALEJANDRA BUITRAGO | elsiglo
fotos | JOEL ZAPATA
JAS
