Parcelero fue asesinado de dos balazos en Zuata

De dos disparos, uno en la cabeza y otro a la altura del pectoral izquierdo, asesinaron a un ciudadano de 57 años de edad, que fue reseñado en el servicio de Medicina Legal como Luis José Tocuyo Mejías.


El cadáver de este señor fue localizado en un terreno baldío del sector Prado de María, en la carretera que conduce hacia Zuata en el municipio José Félix Ribas al este del estado Aragua.


Algunas personas que pasaban por el lugar observaron el cuerpo del hombre; al acercarse constataron que había sido baleado, informó la policía. Rápidamente avisaron de la novedad, por lo que varias comisiones se presentaron al sitio.


Detectives del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas, Delegación Municipal La Victoria, llegaron al lugar, realizando el levantamiento del cadáver.


Se presume que a Tocuyo Mejías lo asesinaron en otro sitio y liberaron el cuerpo en el terreno baldío. Los pesquisas no encontraron elementos de interés criminalístico, por lo que tendrán que profundizar en las investigaciones.


Por el momento se ha descartado el móvil del robo, porque de acuerdo a sus familiares, Luis José no tenía muchas pertenencias. La hipótesis que manejan hasta ahora es la venganza.

JOCOSO Y CARÁCTER FUERTE


En las inmediaciones de la morgue de Caña de Azúcar se encontraba la señora Yajaira Tocuyo Mejías, hermana de la víctima. Consternada accedió a conversar con los representantes de los medios de comunicación, afirmando inmediatamente desconocer las razones del porqué mataron a Luis José.


«No sabemos nada, sólo que lo encontraron el sábado en la mañana. Una amiga fue quien me avisó, por lo que llegué al sitio. Era mi hermano quien estaba allá, tirado, muerto», apuntó.


Sobre enemistades o cuentas pendientes, Yajaira, que es parte de una congregación cristiana de Testigos de Jehová, dijo no saber si su hermano tenía problemas, subrayando que «era echador de bromas, con un carácter fuerte (altanero en ocasiones), pero que se conozca no tenía rencillas».


«Él trabajaba en parcelas, las limpiaba, las cuidaba, en especial por la zona de El Castaño, las personas de ahí le tenían mucho aprecio. El Negro (le decían en la familia) era trabajador y de verdad no entendemos porqué lo mataron así, esa persona no debe tener la conciencia tranquila», argumentó.


No saben con quien estuvo Tocuyo Mejías en las últimas horas en vida. «Nos dijeron que estuvo trabajando y ya iba para la casa de mi madre ya fallecida. Desde ese momento no se supo más nada de él hasta que lo encontraron muerto», acotó.


Comentó que él se tomaba algunos traguitos de licor, pero que no era un adicto al alcohol. «Esto nos consterna mucho, nos afecta, es primera vez que lamentablemente pasamos por estas circunstancias», puntualizó la señora.


Agradeció el apoyo que le han ofrecido en la policía y el Cicpc, por lo que pidió que investiguen a fondo este crimen. «De verdad que no debe estar tranquilo quien lo mató; no tiene corazón la persona que le quita la vida a otra. Esto es muy difícil para todos», concluyó.

HBRI. | elsiglo