El debut de Powell en los Clippers

Con la autoridad que se le presupone al actual campeón de la NBA; Los Milwaukee Bucks ganaron sin mayores problemas a Los Angeles Clippers (113-137) pese al estupendo debut de Norman Powell con los angelinos después de su traspaso desde los Portland Trail Blazers.

Powell
FOTO : REFERENCIAL

Powell logró 28 puntos (incluidos cuatro triples) en solo 24 minutos de juego mientras que Robert Covington; también incluido en la operación con los Blazers, dejó asimismo buenas sensaciones con 13 puntos en 23 minutos.

El aire fresco de Powell y Covington no fue suficiente para frenar a unos Bucks que encestaron el 54,4 % de sus tiros y que pasaron el rodillo con Giannis Antetokounmpo (28 puntos, 10 rebotes y 5 asistencias) al frente de la avalancha.

Los cinco titulares de los Bucks se salieron con al menos 17 puntos cada uno.

Jrue Holiday (27 puntos y 13 asistencias) cortó con serenidad la reacción de los Clippers; Pat Connaughton (18 puntos con 6 de 9 en triples) fue un francotirador casi perfecto, Bobby Portis (24 puntos y 11 rebotes) se peleó con todos en la zona y Khris Middleton (17 puntos y 6 rebotes) supo aparecer cuando su equipo lo requería.

En los Clippers, que no pudieron repetir el épico triunfo del pasado jueves ante Los Angeles Lakers (111-110); el español Serge Ibaka consiguió 7 puntos (3 de 5 en tiros), 7 rebotes, una asistencia y un tapón en 19 minutos saliendo del banquillo.

GOLPE EN EL SEGUNDO CUARTO

El partido arrancó con un sabroso duelo entre Marcus Morris (11 puntos en el primer parcial) y Giannis Antetokounmpo (8).

Norman Powell no tardó en llamar la atención de su nueva afición mostrando desparpajo y creatividad en ataque.

Tras un primer cuarto de igualdad (32-28); los Clippers dieron un pequeño estirón gracias a un triple de Robert Covington (37-28 con 11.24 por jugarse) que sirvió para activar definitivamente a los Bucks.

Llevando el partido a un tono mucho más correoso y defensivo, los de Milwaukee empezaron a sentirse más cómodos en la cancha con un Jrue Holiday cada vez más asentado en la dirección y que llevó a su equipo a empatar el partido (40-40 con 5.24 para el descanso).

Los Clippers habían perdido el hilo del encuentro y sufrían además a un Antetokounmpo que imponía su ley en defensa y ataque.

Para rematar el pobre tercer cuarto de los angelinos (19-32 tras un mísero 24 % de tiros en ese cuarto); Bobby Portis metió un triple sobre la bocina que reflejó la superioridad de los Bucks en la primera mitad (51-60).

ASEDIO DESDE EL TRIPLE

Pat Connaughton solo había metido 3 puntos en los dos primeros cuartos; pero en la reanudación no ahorró munición para destrozar a los Clippers.

Con cuatro triples en poco más de minuto y medio; la mejor versión de Connaughton catapultó a los Bucks a una distancia que comenzaba a parecer insalvable (56-79 con 7.57 por jugarse).

Cada jugador de los Bucks parecía conocer su papel y lo cumplía a la perfección.

Bobby Portis y Greg Monroe sumaban aquí y allá en el juego interior mientras Antetokounmpo seguía haciendo mucho daño a Ivica Zubac.

No obstante; el dinamismo de Powell permitió a los Clippers llegar con algo de vida al último cuarto (81-99) tras otro mal parcial de los locales (30-39).

Ese breve impulso que habían cogido en el tercer cuarto lo extendieron en el arranque del desenlace.

Con Powell al mando de las operaciones, Ibaka derrochando sudor e intensidad en la pintura; y Covington aportando acierto en el tiro, los Clippers dieron forma a un parcial de 9-2 que hizo creer a los fans angelinos en una nueva y espectacular remontada de las que su equipo ya ha logrado varias este año (90-101 con 9.40 por jugarse).

Los Bucks parecían algo despistados entre pérdidas de balón y fallos en defensa; pero Holiday cerró la hemorragia de su equipo con 7 puntos seguidos y entre Connaughton y Portis pusieron la guinda a una victoria muy robusta de los de Milwaukee.

EFE