La filial brasileña del banco español Santander confía en el potencial crediticio de las pymes y en el segmento de las tarjetas de crédito en 2022, un año electoral y en el que el país suramericano todavía se recupera de los estragos económicos causados por la pandemia de coronavirus, afirmó este miércoles el presidente de la entidad, Sergio Rial.
“Todo año es diferente” y la inflación, que en 2021 superó los 2 dígitos (10,06 %), “tiene un papel en el poder de compra” y, por eso, “es una variante importante a ser medida”, pero el mercado crediticio para pymes, pagos electrónicos y financiación de vehículos representan oportunidades, señaló Rial en una teleconferencia con periodistas para analizar los resultados anuales.
El Banco Santander obtuvo el año pasado en Brasil un beneficio atribuido de 2.325 millones de euros (unos 2.626 millones de dólares), un 21 % más que en 2020, gracias al aumento de los ingresos, la estabilidad de los costes y las menores dotaciones, según informó a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
“Vimos una desaceleración del crédito inmobiliario en la comparación con los 2 últimos años, pero vemos al frente una mayor financiación de coches nuevos y de renegociaciones con clientes intentando estructurarse para los próximos 18 meses”, apuntó el ejecutivo.
Así, el mercado de crédito encuentra también “una oportunidad con pymes que hoy están mucho mejor preparadas para el crecimiento. Hay una actividad mayor en las pymes de lo que vimos en los últimos 2 años”, agregó. Otra de las oportunidades está en el segmento de las tarjetas de crédito.
En una nota, la entidad explica que la facturación se situó en niveles récord, al igual que la captación de clientes de tarjetas, con lo que la mejora de la productividad se reflejó en un aumento del 29,7 % de la ratio de eficiencia.
“La pandemia desmonetizó la economía y no existe la necesidad del papel moneda y, en el caso de las tarjetas de crédito, no vemos difícil en llegar a una facturación de 400.000 millones de reales (unos 75.901 millones de dólares) en 2022”, que representarían un avance anual del 30 %, comentó Rial.
El año pasado, la facturación por tarjetas de crédito del Santander Brasil alcanzó los 306.000 millones de reales (unos 58.064 millones de dólares) y que representaron un aumento del 26 % en comparación con 2020. Rial insistió también en la “expansión” para 2022 del “canal físico”, con la apertura anual de un centenar de agencias, “predominantemente en ciudades del interior y en barrios periféricos de las capitales”.
De otro lado, el presidente del Santander Brasil se refirió al año electoral en el país suramericano, con elecciones generales en octubre y su eventual impacto en la economía. “El banco no tiene una opinión política y el mejor resultado es la celebración de la democracia.
Es un privilegio tener millones de personas votando. Vamos a continuar viendo en Brasil la relevancia que el país tiene y la de su sector privado para ayudar en la agenda de crecimiento”, resaltó Rial, también presidente de la Confederación Nacional de Instituciones Financieras (CNF). “El sector financiero debe ser oído, pero eso será natural”, puntualizó.
