Comer de manera saludable es un hábito, una actitud, una forma de vida y una decisión importante en pro de la salud. El cuerpo cambia completamente, se transforma y se ve mejorado cuando se alimenta de la manera adecuada, y no siempre tiene que ser un sacrificio, sino que puede convertirse en un disfrute.
Si no se tuviera que entrar en ningún tipo de detalle o receta, una de las características de la comida saludable es combinar métodos de preparación sencillos -sancochar, asar, cocinar a la plancha, o comidas que no ameritan pasar por el fuego- con ingredientes saludables o suficientes vegetales, para mantener un equilibrio, para que la preparación sea rápida y para que se mantengan todas las propiedades de los ingredientes que se utilizan.
Pero, cuando se habla de recetas, algunas son más fáciles y rápidas que otras y es en ellas donde debe hacerse hincapié.
Salmón a la plancha
O una de las variantes más utilizadas, la merluza. Una de las ventajas de este plato es lo rápido que se prepara, ya que puede condimentarse únicamente con sal y pimienta para luego colocarlo sobre la plancha.
La mejor manera de acompañar a este plato es con verduras o vegetales, que también se pueden colocar a la plancha, como pimientos rojos o berenjenas, dando como resultado un plato saludable, bastante diverso y colorido.
Huevos revueltos
Preparados como revueltos o salteados, los huevos se convierten en un desayuno o una cena muy divertida. Los huevos son una fuente de proteínas bastante económica y muy fácil de preparar -a la vez que pueden servir como ingrediente para otra gran cantidad de recetas-.
Si se quiere añadir una pizca más de saludable, dentro de la misma preparación de los huevos revueltos primero se pone a sofreír en la sartén algunos vegetales como pimientos, cebollas y ajo, para posteriormente agregar los huevos y revolver. El resultado será una versión más colorida pero sobre todo muy sabrosa.
Calamares o camarones salteados
Salteados o zarandeados, los productos del mar son excelentes para preparar comidas saludables porque tienen un porcentaje de grasa muy bajo y los aceites que contienen suelen ser muy saludables.
En este caso, aparte de la sal y la pimienta que se usan para condimentarlos -poco, para conservar su sabor natural que es excelente y profundo-, se utilizarán ingredientes como la salsa inglesa, el ajo, cebollas, orégano o laurel, aparte de algún jugo o fruta para darle una tonalidad diferente, siendo casi siempre lo ideal el zumo de naranja o hasta las rodajas de piña, según lo que se quiera conseguir o cómo se pretenda acompañar.
Milanesas empanadas
Las milanesas de pollo representan uno de los platos más sencillos y más sabrosos, a la vez, que se pueden preparar en cualquier cocina.
Si se cuenta con una freidora de bajo consumo de aceite, se pueden preparar con mucha menos culpa, si las pretensiones son mantenerse dentro de la franja de lo saludable. Sin embargo, el pollo y sobre todo el formato de la milanesa no suele representar una comida poco saludable, de allí que si se combina con ingredientes y demás guarniciones que sigan el concepto, se puede tener un almuerzo muy variado.
Empanarlas con jamón de pavo, utilizar un empanado integral -incluso el pan integral molido puede funcionar bien-, y acompañarla con vegetales como el aguacate o los plátanos sancochados, puede ser un almuerzo elegante, saludable y de muy fácil preparación.
Un hábito
Comer saludable no es cosa de un par de recetas o de un día. Amerita disciplina y adquirir hábitos. Si para ello se tienen en cuenta las recetas más interesantes y sabrosas, comer saludable dejará de ser algo con connotaciones negativas para convertirse en un modo de vida donde se sienta cómodo y feliz.
Como sucede en muchas ocasiones, no es tanto la elección de los ingredientes como sí lo es su preparación. Por ello, adoptar preparaciones simples y acompañantes vegetarianos puede tener gran incidencia sobre los resultados pretendidos.
