La Guardia Costera estadounidense repatrió este viernes a 14 inmigrantes cubanos producto de dos interceptaciones en aguas de los Cayos de Florida, en el extremo sur del estado, informó esta institución.
La primera interceptación se llevó a cabo este martes, cuando una avioneta de los guardacostas divisó una balsa inflable de color azul a unas 46 millas (74 kilómetros) al sur de Cayo Hueso y notificó de inmediato a la base naval, que los recogió.
La segunda detención tuvo lugar el pasado miércoles y se produjo de una manera similar, cuando una patrulla rutinaria aérea avistó una precaria embarcación a unas 18 millas (28 kilómetros) también de Cayo Hueso y alertó a la Guardia Costera de su ubicación.
Los inmigrantes se encontraban en buen estado de salud.
“Navegar en una embarcación no apta para el mar es peligroso y puede resultar en la pérdida de vidas”, señaló en un comunicado el teniente de la Guardia Costera Mario Gil, quien pidió a “todos los marineros o navegantes que informen sobre cualquier posible viaje de inmigrantes para ayudar a prevenir” muertes en el mar.
En lo que va del presente año fiscal 2021, es decir desde el 1 de octubre de 2020, la Guardia Costera ha interceptado en el mar a 745 cubanos.
Según cifras suministradas por las autoridades estadounidenses, en el año fiscal 2020 fueron 49 los inmigrantes cubanos interceptados, mientras que en 2019 y 2018 el número llegó 313 y 259 respectivamente.
La puerta de entrada de cubanos sin permisos legales a EE.UU. estuvo abierta hasta el 12 de enero de 2017, cuando el entonces presidente Barack Obama les retiró los beneficios migratorios al cancelar por orden ejecutiva la política de “pies secos/pies mojados”.
Desde ese entonces, los cubanos que ingresan de forma ilegal a Estados Unidos carecen del permiso temporal de residencia y, en caso de pedir un asilo político, lo tendrán que solicitar en igualdad de condiciones que el resto de inmigrantes.
