Los precios del petróleo ascendían a 69 dólares el barril en la jornada de este martes, en medio de un mercado que se focaliza en las restricciones de producción de la Opep+ hacia una oferta más reducida, aunque crecen las expectativas positivas en torno a una recuperación de los niveles de demanda de combustible.
Tal como reseñaron varias agencias de noticias, este lunes el crudo alcanzó el eslabón más alto que se haya registrado desde el inicio de la coyuntura sanitaria por el Covid-19, luego que las fuerzas hutíes de Yemen atacaran con misiles las zonas petroleras sauditas el domingo pasado. Arabia Saudita aseguró que había logrado frustrar el ataque y se desplomaron los precios mientras bajaban los miedos en torno al suministro.
Una nota informativa publicada por Reuters destaca que a las 10:14 GMT el Brent se elevó en 78 centavos, lo que se traduce en 1,1 %, para colocarse en 69,02 dólares el barril, luego de negociarse en 67,61 dólares.
Por otra parte, el crudo estadounidense West Texas Intermediate (WTI) acrecentaba 41 centavos para negociarse en 65,46 dólares.
En este sentido, el experto de PVM Tamas Varga dijo que “las caídas se han considerado últimamente como oportunidades de compra”, destacando que “La reunión de la OPEP+ de la semana pasada garantizará que el equilibrio petrolero mundial se haga más ajustado en el futuro previsible”.
En la jornada de este lunes, el Brent remontó a 71,38 dólares, su nivel más alto desde el 8 de enero de 2020 y el crudo estadounidense alcanzó los 67,98 dólares, el peldaño más alto desde octubre de 2018.
Al respecto, el analista de la corredora OANDA, Jeffrey Halley, aseveró que “con una suboferta estructural en el mercado físico ahora, es probable que cualquier caída en los precios del petróleo atraiga la atención de los compradores físicos”.
Tras ser aprobado un paquete de estímulo de 1,9 billones de dólares, por parte del Senado de Estados Unidos, los precios también escalaron por las expectativas de recuperación económica, tras las declaraciones de la secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen, que asegura que este paquete de ayuda permitiría el impulso de una etapa de recuperación económica “muy fuerte”.
