Acosador sexual condenado a tres años de cárcel tras campaña social en Egipto

Un tribunal egipcio condenó hoy a tres años de cárcel a un joven acusado por decenas de chicas de acoso sexual, asalto, amenazas y otros delitos, en la primera sentencia contra él después de que las autoridades decidieran actuar tras una amplia campaña en las redes sociales.

Foto: Referencial

Según un comunicado del Tribunal Económico de El Cairo, Ahmed Bassam Zak, ha sido condenado a tres años de prisión por asaltar a tres menores de edad, chantajearlas y hacer un uso indebido de las redes sociales y otros canales de comunicación para cometer esos delitos.

La sentencia es apelable y es la primera contra el joven, que fue acusado por decenas de chicas anónimas de acoso y agresión sexual, a través de la cuenta de Instagram “assault police”.

El estudiante universitario de 21 años fue arrestado el pasado julio, después de que la Fiscalía General aceptara una denuncia contra él por parte de una mujer que había sido chantajeada en 2016 para que accediera a mantener relaciones sexuales con él.

La Fiscalía le acusó entonces de asaltar a tres menores de 18 años y amenazarlas con divulgar información privada para que continuaran a mantener contactos sexuales con él. El acusado tomó imágenes mientras besaba a una de ellas sin su consentimiento y amenazó con difundirla.

Aparte de las acusaciones formales, en las redes sociales emergieron todo tipo de relatos y testimonios de chicas que fueron víctimas del estudiante de la Universidad Americana en El Cairo (AUC), que se movía en círculos privilegiados de la sociedad egipcia.

El pasado agosto, el Parlamento egipcio aprobó una enmienda a la ley que tipifica los delitos sexuales para salvaguardar la identidad de las víctimas de acoso y violación para promover la denuncia por parte de las mujeres, que se escondieron detrás del anonimato en internet.

Lo mismo ocurrió con las denuncias de una violación en grupo en un lujoso hotel de la capital en 2014, que salieron a la luz después del caso de Bassam Zaki gracias al que se denominó como el movimiento “MeToo” egipcio en las redes sociales.

Sin embargo, en los pasados meses varios testigos o víctimas han sido detenidos y acusados de delitos contra la moral, dejando en evidencia las dificultades a las que se enfrentan a la hora de denunciar este tipo de incidentes en una sociedad conservadora.