Los carniceros de la ciudad de La Victoria lo volvieron a hacer, tras supuestamente presentar bajas ventas en los productos cárnicos, una vez más decidieron bajar o simplemente mantener los costos, alegrando hasta cierto punto a más de un consumidor que había dejado de lado o sustituido el consumo de la proteína.
Y es que para nadie es un secreto que desde hace varios meses los diferentes cortes de carne y pollo ha registrado alzas casi que a diario, consiguiendo que los consumidores los alejen de sus mesas. Sin embargo, desde inicio de esta semana, al parecer las cifras se detuvieron dejando atrás la época de incremento.
En este sentido, a través de un recorrido realizado por las principales carnicerías de la capital de la juventud, se corroboró por parte de los dueños y encargados de los sitios expendedores de este rubro, que ahora mismo no hay buena venta de estos alimentos, ya que las familias no tienen el dinero necesario para adquirir los productos como lo hacían en tiempos anteriores.
“Estamos pasando una crisis fuerte. Ya las personas ni se acercan a preguntar precios, simplemente pasan y ven la vidriera o compran en muy pocas cantidades, presumo que para el día. Esto nos ha traído pérdidas, no encontramos en ocasiones cómo pagar las mercancías y nos ha tocado regresarlas”, puntualizó Joao Andrade, dueño de uno de estos comercios en la calle Ribas Dávila.
“Hasta para nosotros se nos ha hecho forzado para poder pedir mercancía, porque no sabíamos, con qué precio no las presentaban los distribuidores. No obstante, el último pedido vino al mismo costo del anterior, lo que nos permitió dejar la carne y el pollo en el mismo precio y de nuevo tuvimos una pequeña entrada”, dijo Andrade.
Ante este panorama, los productos cárnicos en muchos de estos locales se han mantenido. Siendo así que la carne molida se encuentra desde los 45 mil el kilogramo, la costilla de res 39 mil, la carne para guisar 48 y el bistec de solomo 55 mil soberanos. Por su parte, el pollo también ha mantenido sus precios, no excediéndose de 39 mil por kilogramo.
Carlos Martínez, carnicero dijo, “el pollo cuando sube es muy poco. Pero el alto costo de la vida, a veces deja a las personas sin opción”.
DANIEL MELLADO | elsiglo
