De vuelta el jueves en el lineup abridor, a Chris Davis no le tomó mucho tiempo para alcanzar otro desafortunado hito.
Luego de fallar con un elevado en su primer turno contra Aaron Brooks de los Atléticos, Davis implantó un récord de las Grandes Ligas al sumar 58 viajes al plato seguidos sin dar imparables, una racha que empezó la campaña pasada.
El puertorriqueño Tony Bernazard tenía dicho récord desde 1984. El batazo de Davis, tomado por el dominicano Ramón Laureano en el jardín central, fue registrado a 105.1 mph, de acuerdo con Statcast, la bola más fuerte que ha bateado este año.
En su segundo turno en el cuarto acto, Davis falló con un rodado al campocorto Marcus Semien.
Davis no tiene hits en 32 turnos esta campaña y desde el pasado 18 de septiembre tiene de 53-0. Ese también es un récord, pues esta semana Davis pasó la marca previa de 46 que tenía el dominicano Eugenio Vélez.
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