Un individuo que era reconocido con el remoquete de «El Guajiro» y además solicitado ante el Tribunal de Primera Instancia en lo Penal en función 4to de Control del Circuito Judicial de Aragua, según oficio 3497, de fecha 20 de octubre del 2017, con orden de aprehensión número 591 por el delito de revocatoria de medida cautelar, causa del tribunal 4C28850-16, murió en un enfrentamiento sostenido con funcionarios de las Fuerzas de Acciones Especiales de la Policía Nacional Bolivariana.

También le puede interesar: Senadora demócrata Gillibrand prepara posible candidatura presidencial

La situación irregular ocurrió en horas de la tarde del jueves pasado en el interior de una vivienda situada en la calle Carlos Elías, en Palo Negro del municipio Libertador, en pleno centro de la referida ciudad.

La persona muerta en ese hecho fue identificada como Anderson Yoel Sandoval Aponte, de 29 años de edad, a quien se le incautó un arma de fuego, tipo pistola marca Walter, PPK, calibre 635 con una empuñadura de plástico de color negro sin seriales visibles.

De acuerdo a los detalles del caso, las comisiones de las FAES se trasladaron a esa zona atendiendo denuncias de la comunidad sobre la presencia de sospechosos vinculados en algunos delitos previstos y sancionados en la legislación nacional.

Una vez en el sector, los investigadores avistaron a una persona e inmediatamente se le dio la voz de alto. No obstante, el sujeto emprendió la huida a toda carrera.

En la persecución, Sandoval se introdujo a toda velocidad a una vivienda llevando entre las manos un presunto armamento y desde el inmueble efectuó varios disparos a las comisiones, registrándose posteriormente un intercambio de disparos.

Durante la acción irregular, el hombre cayó herido e inmediato lo refirieron a La Ovallera, donde murió a causa de las heridas, se comentó de manera extraoficial a los periodistas.

Al lugar se presentaron comisiones del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas, iniciando las averiguaciones correspondientes del caso. El cadáver fue remitido a la Morgue de Caña de Azúcar para la autopsia de ley.

SEGÚN LA FAMILIA: «ES UNA MENTIRA»

Hortensia Aponte, madre de Anderson, quien se acercó en la mañana de ayer a la morgue de Caña de Azúcar, manifestó lo siguiente: «Creo que yo también tengo derecho de aclarar las circunstancias del suceso e informar al pueblo que mi hijo no era ningún delincuente».

Eso del enfrentamiento con las FAES es «una mentira montada por los funcionarios para ellos quedar bien parados».

«Mi hijo se encontraba en la casa preparando la comida junto con su mujer. Los policías se llevaron a la muchacha y mi hijo lo sacaron hacia otro sitio, donde lo mataron a tiros», dijo.

Los hechos ocurrieron antes de las 5:00 de la tarde del jueves, adicionó la denunciante, quien añadió esa arma que apareció allí se la sembraron esos funcionarios. Simularon un hecho que nunca se dio.

«Ahora tengo a mi hijo muerto y yo sumida en un tremendo dolor», expresó la señora Aponte. «Vengo a retirar su cadáver y a todo le ponen trabas, será que lo voy a enterrar ya descompuesto», concluyó señalando.

LUIS ANTONIO QUINTERO | elsiglo
fotos | FAUSTINO PÉREZ