Detenido taxista por torturar y abusar de una niña venezolana

Una niña venezolana de tres años fue secuestrada el pasado miércoles por un taxista en Chiclayo, en el norte de Perú. La pequeña fue rescatada 48 horas después, pero en ese tiempo fue víctima de abuso sexual y tortura por parte del hombre.

Henríquez García, el monstruo de Chiclayo, en Perú


Las autoridades identificaron a Juan Antonio Henríquez García, de 48 años, quien subió a la niña a su taxi, según se pudo observar en las cámaras de seguridad. Por lo tanto, las autoridades lo detuvieron y confesó que tenía a la pequeña secuestrada en su casa.


La policía se dirigió a su vivienda, en donde encontraron a la niña inconsciente, tirada en el suelo y maniatada. Posteriormente, el Instituto de Medicina Legal (IML) confirmó, mediante exámenes, que la niña fue abusada sexualmente por Henríquez.


«Quiero que el violador se muera, que lo maten, porque no tuvo piedad con mi hija, no tuvo piedad, es un daño enorme que le ha hecho», dijo el padre de la menor poco después de conocer la información del IML, según medios locales.


Después de que se hiciera pública la información, un grupo enfurecido prendió fuego la casa de Henríquez, en donde abusó y mantuvo secuestrada a la niña


El Poder Judicial de Perú dictó nueve meses de prisión preventiva para Henríquez, mientras está a la espera del juicio. Sin embargo, el Gobierno de Pedro Castillo solicitó la pena máxima para el hombre que abusó de la niña.


«Condenamos y repudiamos la agresión sexual que sufrió una menor de edad en Chiclayo. Este lamentable hecho no debe quedar impune. Nuestra solidaridad y todo el apoyo a la niña y su familia. Pedimos al Poder Judicial el mayor peso de la ley para el culpable», dijo Castillo.


El presidente peruano se trasladó a Chiclayo para reunirse con los padres de la niña ultrajada. «Nos vino a dar su apoyo hacia mi persona y mi niña y nos dijo que va acelerar un poco los trámites, lo legal, para que esa persona pague lo que se merece», expuso el padre.


Por su parte, se pudo conocer que los presos de la cárcel de Chiclayo amenazaron a Henríquez, a quien darán una «linda bienvenida». «Le haremos pagar el daño que hizo, nosotros también somos padres y tenemos hijos y eso es una maldad», indicaron.

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