Habitantes de Unisol con servicios públicos deficientes

En la comunidad Unisol de La Chapa, municipio José Félix Ribas, cada vez son más los problemas que aquejan a los habitantes, quienes informaron que la municipalidad los ha echado a un lado, consiguiendo el declive en el funcionamiento de los principales servicios públicos, lo que causa gran malestar en ellos.

Sin calles dignas permanecen en Unisol

En este sentido, a través de un recorrido realizado por la zona, se evidenció de la mano de los afectados, que las dificultades que más los golpean son la falta de alumbrado público, el casi nulo asfaltado en la vía y por si fuera poco fallas en la vigilancia policial, la cual aseguran que va en picada.

La señora Griselda Rodríguez comentó que la calle se encuentra en total oscuridad cuando cae la noche, ya que los postes no cuentan con las luminarias necesarias, lo que ha hecho que estos experimenten un «toque de queda», que ni el confinamiento ha logrado, debido a que la oscuridad ha incrementado los actos de robo y vandalismo.

«Después de que se esconde el sol, todo el mundo debe estar en su casa y no salir, ni a ver a la ventana, porque pueden ser víctimas de los amigos de lo ajeno, que están al pendiente de todo. Lo que estamos viviendo no es vida y al parecer no le importa a nadie, porque no ponen de su parte para apoyarnos o por lo menos conversar para buscar soluciones», expresó Rodríguez.

Igualmente, los denunciantes hicieron énfasis en el mal estado que se encuentra la vialidad. Insistieron que a la urbanización no ha llegado un plan de asfaltado desde su fundación hace más de veinte años, lo que les ha originado grandes problemas para transportarse, sobre todo a los que residen en la parte alta.

«Pasan y pasan gobiernos y todos vienen con promesas, pero nadie las cumple, es más ahorita que están por ir a elecciones, ni se han acercado los supuestos candidatos que nos representarán en la Asamblea; las calles cada vez están peor y ahorita con la llegada de las lluvias esto es una fiesta de pantano, ya se nos hace imposible hasta caminar, debemos hacer maromas para no caernos y si es de noche el escenario es peor, porque si no te caes, te roban«, exclamó Carlos Requena.

Para finalizar, quienes hacen vida en esta parte de la zona sur ribense, instan a los organismos competentes a darse una «pasadita» por el sitio y verificar la situación en que se encuentran los lugareños, para de esa manera puedan planificar un abordaje y solventar la situación presentada. Exigen como posible solución una fiesta de asfalto de una vez por todas, aprovechando que ya están en las fiestas del Cuatricentenario y que la Misión Venezuela Bella anda por ahí.

DANIEL MELLADO | elsiglo