El alto costo que mantiene el pescado ha conseguido que muchas de las amas de casa del municipio José Félix Ribas, se debatan entre mantenerlo en su lista de compras o por el contrario comenzar a sacarlo, puesto que el sueldo que perciben no le da la base para llevar todos los gastos que representan una familia y su alimentación.
El pescado sigue llevándose, pero no en la misma cantidad
Y es que según, algunos habitantes de esta parte del eje Este aragüeño, ante el alto costo de los productos cárnicos, que oscila entre los 300 y 400 mil bolívares, se han visto forzados a reducir o eliminar, en algunos casos, la ingesta de este tipo de alimento.
En este sentido, el señor Héctor Cabeza manifestó que a su parecer todos los costos que presentan las pescaderías están «Por los cielos», sin embargo en comparación a los de los diferentes tipos de carne, sigue siendo económico.
«La verdad en la actualidad todo está cariñoso, pero si comparamos precios, el pescado sigue estando más accesible y para las familias que no tenemos un gran poder adquisitivo se nos acomoda bien a la hora de consumir proteínas y gastar un poco menos», mencionó Cabeza.
Del mismo modo, Gloria Morenos agregó: «Realmente cuando uno hace mercado busca economizar y la mejor opción que tenemos a la hora de buscar el salado es comprando el pescado, porque la carne ya salió de nuestras posibilidades. En mi caso busco los pescados más baratos y la sardina siempre será la mejor alternativa».
Otros consumidores como Nereida Díaz comentan, que por el contrario ya ni el pescado pueden comprar, ya que con lo que ganan de sueldo no les es factible. «Todo lo que uno agarra es para comprar que si una harina precocida, un arroz y hasta caraotas. Ya en mi casa a veces no comemos salado. Hay que arroparse hasta donde la cobija nos permita», puntualizó.
Por su parte, los pescaderos que hacen vida en la entidad informaron que en vista del incremento de los precios las ventas han bajado de manera abismal. Robín Aular, comerciante de este rubro expuso que en su caso las ventas han descendido hasta un aproximado 70%.
«Los precios del pescado se han incrementado bastante y con ello las comercializaciones han disminuido. No obstante las personas siguen viniendo a comprar, pero no como en otras épocas».
Asimismo, mencionó que los pescados que más se llevan son: el atún y el bonito, puesto que la sardina no está en su época de pesca. Aunado a eso, manifestó que los precios están sujetos a las cifras que les pongan en las costas, donde deben buscar los productos semanalmente.
DANIEL MELLADO | elsiglo – La Victoria
