Los ribenses desde hace algunas semanas han evitado que los billetes de 2BSs lleguen si quiera a sus bolsillos, pues a pesar de que es un cono todavía vigente, muchos de los trabajadores del gremio transportista y comerciantes no lo están aceptando, afectándolos de manera directa.
En este sentido, en un recorrido realizado por en el centro de la ciudad de La Victoria, se pudo corroborar que efectivamente son muchos los ciudadanos que no han podido cancelar con este billete, pese a que las entidades bancarias aún los están dispensando.
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En este sentido, Yolbierys Campos, vendedora informal, manifestó su decisión de rechazar el billete y las monedas de cualquier denominación. “No los acepto porque después nadie me los acepta a mí. Sin contar que es un bulto muy grande de billetes”, expresó.
Luis Ojeda, trabajador del volante aseveró, que sí los ha estado recibiendo, pero los ciudadanos muestran negativa y malas caras cuando se les da un vuelto. “A veces hasta te los lanzan a la cara”, agregó. Y es que para tener mil bolívares, una cantidad de dinero suficiente para comprar un almuerzo ejecutivo, se necesitan 500 billetes de dos bolívares.
Por su parte, Adriana Calanche, vendedora, asegura que acumuló al menos 100 bolívares en monedas “no me atrevo a utilizarlos para pagar ni el transporte público, por temor a que me lo devuelvan de mala manera como están acostumbrados. Es increíble como el dinero se devaluó tanto y no sólo eso sino que los bancos sigan dando los billetes, a pesar de que no los aceptan, debe existir un control que nos proteja”.
Entre tanto los ribenses hacen un llamado a los entes competentes a que busquen una solución a este problema, que los mantiene de brazos atados y no les permite tener un nivel de vida óptimo.
“Es que ya ni pagar con tranquilidad se puede. Debe uno andar pendiente de qué billete va a dar y cuál va a recibir”, exclamó Mireya González.
DANIEL MELLADO | elsiglo
