Habitantes de 23 de Enero denuncian las fallas en los servicios públicos de la comunidad, como lo es un vertedero de basura improvisado en la calle Nueva, generando malos olores, moscas y otros animales que ponen en peligro a los ciudadanos.
De este modo, los vecinos del sector piden a las autoridades competentes abocarse a la resolución de estos problemas que mantienen en malas condiciones a la localidad, alegando también que esta situación deteriora las calles, restringiendo el paso de vehículos y peatones cuando la basura sobrepasa el límite, hasta llegar a la zona vial.
CAMIONES DE BASURA
A su vez, las personas que hacen vida en el sector alegan que los camiones de basura públicos que deberían pasar con regularidad para recolectar los desechos sólidos, no lo hacen con frecuencia, generando un vertedero mucho más grande y problemático.
En este sentido, Gilberto Muñoz denunció que «pasó por aquí un camión donde cobran dinero o artículos de consumo diario, como harina, pero no se conforman con un paquete de harina. Le tienes que dar tres cuando menos, así sean dos, tres bolsitas».
Molestos, las personas se quejan de que es injusto que, además de no tener un camión de basura que pase con normalidad, también alegan problemas con las personas que se dedican a escudriñar entre los desechos; para encontrar artículos para vender.
PROBLEMÁTICA AFECTA A TODOS
«Yo, particularmente tuve un problema con los que se ponen a registrar basura, la puedes tener en la puerta de tu casa, tu bolsa, esperando que pase el aseo normal. Ellos la desbaratan, te botan todo ese basurero y te dan la espalda porque ese es su trabajo», manifestó Muñoz.
Por otra parte, Pedro Castillo manifestó que esta situación también afecta a los comercios que están en la zona, especialmente a un establecimiento que se dedica a la venta de cachapas, quienes cuando van a trabajar y encuentran basura y se ven en la obligación de quitarla para que no entorpezca su trabajo.
«El aseo ya tiene como tres o cuatro días sin pasar y va creciendo. Mañana amanece un cerro más grande. Así que eso no es un servicio del Estado», reiteró Gilberto Muñoz.
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También, las personas suelen tomar la basura y quemarla como medida desesperada para limpiar las calles, sin embargo, este acto perjudica a los demás habitantes, propagando enfermedades respiratorias y gripes que nunca se curan, puesto que esto es una práctica constante.
Finalmente, estas personas esperan que próximamente las autoridades pertinentes resuelvan esta problemática para poner fin a la proliferación de bacterias y enfermedades.
ALEJANDRA BUITRAGO | elsiglo
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