Las barberías son el negocio de moda entre los jóvenes, quienes buscan sobrevivir a la crisis económica que atraviesa el país. Hoy día, es común ver en las principales vías de la ciudad “tarantines” improvisados, además de los tradicionales locales que ofrecen a precios módicos cortes de cabello para caballeros y niños.
Aunque no son lugares ostentosos como los que se encuentran en los centros comerciales, los barberos aseguran que los clientes se van satisfechos con los resultados del corte, que en la actualidad oscila entre los 3 y 5 dólares, según el servicio.
En este sentido, Jesús Trujillo, de oficio barbero, manifestó que a pesar de la situación país el movimiento en las barberías se mueve regular, hay días buenos y malos como en todos los negocios.
“Es como todo, a veces abrimos y nos va bien, otras veces no, mayormente los fines de semana es cuando se mueve un poco la cosa, muchos están de descanso del trabajo esos días y aprovechan y vienen a afeitarse para estar bien presentados”, dijo.
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Sobre los precios, Trujillo mencionó que depende del servicio que busque el cliente, ya que hay cortes básicos y otros que son más complejos con formas y rayas, “un corte básico está alrededor de $3 dólares, hay quienes vienen y también piden que se les haga la barba, cejas, mascarillas, eso ya es un poco más costoso.
Por su parte, Alejandro Benítez destacó que a las personas les gusta ir a los sitios más básicos, por factor tiempo y por el costo, “eso era antes que las personas buscaban lo costoso, hoy día cualquier barbero en la calle te hace un corte a la moda en un precio bajo”, afirmó.
A su vez, acotó que los hombres maracayeros son un poco exigentes, pues le gusta andar bien y verse bien, “creo que eso es otro de los puntos por lo que ha habido mucha demanda este año, a nosotros nos gusta vernos bien, por ello, cada semana las barberías están a tope, aunque los clientes fijos acostumbran a venir cada 15 días”, apuntó.
Por otro lado, Sabrina Di Blasco, quien tiene más de 15 años trabajando como barbera, declaró que es común que durante el mes de agosto baje un poco la clientela, ya que los padres siempre ahorran para comprar los útiles escolares, entre otras cosas de uso personal.
“Para estas fechas siempre baja un poco la clientela pero igual se trabaja, en los últimos años ha surgido mucha competencia, pero como uno acostumbra a trabajar con clientes fijos creo que distribuimos bien la cosa, cada quien va para el lugar que le guste más”, resaltó.
Finalmente subrayó que cada lugar ofrece servicios distintos, en algunos se especializan en barbas y mascarillas, otros simplemente ofrecen el servicio básico de lavado y corte.
