El fiscal general de la nación, Tareck William Saab, informó que este jueves se celebró la audiencia del presunto delincuente que contrató los servicios de sicarios para dar muerte al profesor, sociólogo y político Carlos Lanz por un monto de 8 mil dólares en billetes de 50 y 100.
De ese monto, se distribuyeron 3 mil dólares para Castellanos y el resto para los secuestradores y matadores.
La audiencia se llevó a cabo ante el tribunal 4 de Terrorismo en la ciudad de Caracas, y donde Glen Castellanos, confesó los detalles del sicariato cometido contra el profesor universitario Lanz.
El sujeto dio a conocer con detalles la estructura de la organización criminal que ejecutó la muerte por encargo de Maxiorisol Cumare, conocida en su mundo como «Mayi», esposa del político y revolucionario.
«La Mayi» fungió como directora del Inces Aragua y aprovechó su cargo para amasar una fuerte suma de dinero y adquirir bienes en Aragua, Tucacas y Cojedes.
Para no verse involucrada en sus negocios sucios y por los cuales se oponía su esposo que le costó la vida, tenía como testaferro a Tito Viloria, un sindicalista y abogado, otro de los implicados en la trama criminal.
Asimismo indicó la participación de cada uno de los integrantes del abominable, atroz y repudiado crimen cometido contra Laz, quien se encontraba desaparecido desde el 8 de agosto del 2020. Por ese caso hay trece personas implicadas.
Tareck William Saab agregó que al delator de la trama montada por «La Mayi» se le atribuyen los delitos de sicariato, asociación y simulación de hechos punibles ante los hechos registrados en el sector El Baúl, en Cojedes.
Durante la rueda de prensa ofrecida este miércoles en Caracas, Saab dijo que no hay crimen perfecto y la verdad sobre ese hecho se impuso gracias a la mística, profesionalismo y responsabilidad de seis fiscales del Ministerio Público.
Asimismo se contó con la colaboración de comisarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas e igualmente del Sebin. Además, el presidente de la república Nicolás Maduro estuvo al tanto de las investigaciones y aportó su ayuda para esclarecer el horrendo crimen cometido contra el universitario.
Otro de los responsables para llegar al fondo del asunto fue el ministro de Interior, Justicia y Paz, general Remigio Ceballos y el mismo fiscal general, supervisaba el avance de las pesquisas.
Ahora le corresponde al tribunal de la causa aplicar las sanciones contempladas en la ley, según la información revelada a los medios de comunicación social.
LUIS ANTONIO QUINTERO |elsiglo
