Los estados Mérida, Táchira y Zulia han enfrentado en los últimos días los embates de la naturaleza a propósito de las fuertes precipitaciones que han dejado como saldo cientos de familias afectadas, vías intransitables y hasta afectaciones en el suministro eléctrico y de agua potable.
En el estado Zulia se mantiene la alerta temprana para atender la contingencia que ha afectado a poco más de 800 familias y más de 20 mil hectáreas de zonas agrícolas.
La inestabilidad atmosférica ha azotado en mayores proporciones al municipio Catatumbo.
El ministro de Interior, Justicia y Paz, Remigio Ceballos, señaló que han estado enviando comisiones a la zona con «insumos diversos de alimentos, agua potable, ropa, herramientas, medicinas y personal de refuerzo».
En Mérida, por su parte, los productores agrarios han perdido ganados y cosechas, mientras que las principales vías de acceso permanecen obstruidas debido a los derrumbes provocados por las constantes precipitaciones.En esta entidad, los habitantes de algunos municipios se han visto afectados por las fallas en el suministro de agua debido a la destrucción de algunos distribuidores del líquido. Esto como consecuencia de las inundaciones. Finalmente en el estado Táchira, el Gobierno regional afirma mantener bajo control al menos 400 zonas de alto riesgo por las precipitaciones de las últimas semanas, por lo que el secretario regional, Geovat Huérfano, descartó que la entidad se encuentre en estado de emergencia.Sin embargo, las carreteras de acceso al caserío de Montaña Alta, ubicado en el municipio Uribante, están alrededor del 70 % intransitables, y es en esta zona donde laboran los productores y agricultores.
