Aunque en la época de vacaciones para muchos residentes de Maracay, una de las opciones más comunes para distraerse solos, en compañía de familiares o con amigos, son nuestras hermosas playas del litoral aragüeño.
Sin embargo al hacer un recorrido por una de estas áreas, específicamente la Bahía de Cata, pudimos constatar por boca de algunos lugareños, comerciantes especialmente, y de los visitantes, lo difícil que también resulta en la actualidad económica de nuestro país darse un bañito en la playa.
En este sentido, Dinora Guerrero, quien junto a su familia, salió este domingo desde muy temprano de Maracay para pasar un soleado día en Cata, nos cuenta de lo que ahora se requiere para emprender tal propósito.
«Bueno nosotros tenemos días planificando esta venida, y obviamente que en vista a la situación se requiere mucho más que la voluntad de querer hacerlo, pues ahora hay que planificarse bien, programarse con bastante antelación y bueno ahorrar mucho».
«Anteriormente uno podía darse el lujo de venirse sin planificar mucho, pero como está la situación, todos sabemos que uno, el dinero no te alcanza, y dos, movilizarse para acá, por el tema del transporte, tampoco es sencillo».
Por otro lado, la señora Guerrero expresó que para lograr la salida fue necesario llevarse la comida de la casa, planificar un solo día y viajar en vehículo propio, para de esta manera poder pasar un placentero rato en la playa y en familia, que en su caso, con ella suman en total trece las personas, siete adultos y seis niños, los que se dispusieron a darse el chapuzón.
«Todavía no hemos sacado cuenta de cuanto se ha gastado hasta ahora, pero lo cierto es que entre todos se colabora y se necesita de mucha plata, porque por ejemplo el alquiler del toldo con las mesas y las sillas cuesta 70 mil bolívares nada más».
Por su parte. Antonio Márquez, quien viajó desde La Guaira con su grupo familiar de trece personas, comentó que fundamental para darse un fin de semana playero fue el tener carro propio, así como el contar con los recursos económicos para pagar la posada, la cual incluía desayuno y almuerzo y la cancelaron en divisas.
Y es que al hacer un estimado de los posibles gastos que una persona hace, si sale un fin de semana completo a la playa de Cata, se puede detallar lo siguiente, en primer lugar sin tan solo viene de Maracay de pasajero, el viaje oscila en 4 mil hasta seis de un carro pirata, dependiendo de la época, hora y de la oferta de autobuses disponibles, pues estos por los momentos suelen hacerse difícil por la poca cantidad que hay, y la demanda de pasajeros en temporada, por lo tanto otra opción es un carrito expreso, que hasta la Bahía puede costar desde 100 mil bolívares en adelante.
Bien, en el caso de la posada si se opta por quedarse tres días y dos noches, llegando el viernes, sale alrededor de los 80 dólares, incluyendo en algunos desayunos y almuerzos.
En cuanto a las comidas y estadía en la orilla del mar, un toldo por un día con mesa y cuatro sillas vale 70 mil, y en el caso de la comida una ración de tostones de 12 piezas 25 mil bolívares, pescado frito con ensalada el más económico, el cual es la cojinúa o blanquilla en 35 mil, refresco grande de dos litros 50 mil y agua mineral de 1 litro 30 mil.
Es decir que por persona un fin de semana en la playa pudiera estar por el orden de los mil quinientos bolívares, haciendo la cancelación máxima del margen de gastos anterior.
No obstante, el movimiento de temporadistas en lo que va del mes de vacaciones según información aportada por los mismos comerciantes ha sido muy baja.
Respecto a ello, Joan Oliveros, propietario de un negocio de comida en Cata dijo, «las ventas están bajas, pues como todos sabemos por el mismo tema de la situación país, sin embargo, bueno, uno trata de vender más económico para atraer a los temporadistas y seguir con el negocio».
«Yo aquí ofrezco variedad como fosforera, camarones rebozados, pescadito frito y raciones de tostones, por lo general lo que más se vende es lo más económico, que es la ración de tostones en 25 mil y pescado como la cojinúa en 35 mil bolívares».
Finalmente, Rosa Torrealba y Ronny Salcedo, vendedores ambulantes en la Bahía comentaron lo difícil que se ha hecho para ambos las ventas, producto de la baja de temporadistas, además que por la falta de efectivo, también se les dificulta el vender más rápido sus mercancías.
«Yo vendo brownies uno en 20 mil y dos por 35 mil bolívares y bueno para poder vender paso el punto en los negocios por aquí cerca que me cobran un porcentaje, ya que el pago móvil se hace difícil aquí, por la poca señal y bueno muy poca gente carga efectivo», comentó Torrealba.
Ronny por su parte dijo, » yo vendo chupetas aquí y coquitos, pero ahora me establecí con las chupetas, debido a que se venden más rápido por el precio, el cual es 2 mil bolívares y es más fácil que la gente te pague en efectivo y a mi me resulta más rentable, pues este tipo de mercancía yo la adquiero en Maracay más económica, eso si en efectivo».
JOSÉ LUIS BLANCO | elsiglo
fotos | RAFAEL SALGUERO
