Maracay, la Ciudad Jardín de Venezuela conmemora hoy sus 323 años desde su fundación, concretada el 5 de marzo de 1701, momento en el que fue elevada a parroquia por el entonces Obispo de Caracas, Diego de Baños y Sotomayor, en respuesta a la solicitud planteada por sus habitantes.
También conocida como la Cuna de la Aviación venezolana, Maracay destaca por la calidez y amabilidad de su gente, convirtiéndola en un lugar acogedor para propios y visitantes. Además cuenta con un clima cálido con hermosos paisajes, rodeada de ríos, playas y montañas que cautivan a quienes la visitan.
En tiempos de Gómez, la hoy capital aragüeña se convirtió en el epicentro político de Venezuela, siendo el lugar preferido del Benemérito. Estos valles vieron la concentración de todos los poderes del Estado, por ello, el general promovió su residencia a la Ciudad Jardín, específicamente en lo que hoy se conoce como el Zoológico de Maracay.
Para entonces, las autoridades gubernamentales debían viajar semanalmente para rendir cuenta sobre sus funciones en el Poder Ejecutivo, marcando un hito en la historia de Maracay para el año 1909.
Este legado histórico ha dejado huella imborrable en la ciudad, con la creación de instituciones de renombre internacional como la Maestranza César Girón, la primera institución aérea del país, teatros, museos y otros espacios culturales y recreativos de gran relevancia.
323 AÑOS DE HISTORIA
En el marco de la celebración de los 323 años de fundación de la Ciudad Jardín, el cronista e historiador del municipio Girardot, Mauricio Maracara, compartió detalles precisos que resaltan el modelo histórico y emancipador que caracteriza una de las ciudades más emblemáticas y luchadora de nuestro país.
En este sentido, Maracara aseguró que Maracay es una de las ciudades de la región con mayor relevancia, catalogada como tierra de gracia y de encuentros, con su nombre originario según el vocablo de la lengua caribe «Maracayá», refiriéndose a un felino que habitaba los espacios y que posteriormente le daría el nombre a un cacique.
«Hoy tenemos una Maracay que está luchando por el rescate, hay un esfuerzo de la propia gente de recuperar ese espacio de la Maracay de ayer, sus espacios naturales, públicos, su pasado histórico, su presente, memoria e inclusive la identidad, la heterogeneidad y la diversidad étnica del ser humano» dijo el cronista local.
Asimismo, aseguró que la capital aragüeña es y seguirá siendo una de las ciudades más significativas del territorio venezolano, envolviendo el pasado y presente del país, siendo considerada una zona de interés y de cultura general por los sucesos de 1812 y 1813 que dieron lugar a la Batalla de la Victoria, donde las fuerzas realistas que estaban al mando de Domingo Monteverde, rompieron las líneas defensivas patrióticas dirigidas por el general Francisco de Miranda.
No obstante, el también historiador manifestó que gracias a la gran diversidad que caracteriza a la ciudad, no hay algo que la defina según la época y la historia, sin embargo, acotó que Rancho Grande es un punto esencial, ya que nace el parque Henri Pittier, así como el Zoológico y el Toro de Las Delicias, puntos de interés de la localidad.
Finalmente, agregó que hablar de Maracay es hablar de la Aviación Bolivariana, Milicia, Ejército, pues cuenta con muchos seudónimos, definiciones y conceptos que hacen de la Ciudad Jardín un lugar lleno de pasiones, amores, historias, personajes y noticias, convirtiéndose en una diversidad de mestizaje y luchas sociales que hacen de la capital aragüeña una atracción para quienes la visitan.
LA MARACAY ANHELADA
A propósito de sus 323 años de fundación, Maracay se encuentra en un momento de transición entre lo moderno, representado por sus centros comerciales y arquitectura vanguardista, y la necesidad de mejorar los servicios públicos básicos.
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Si bien la ciudad ha apostado por el desarrollo urbano y las mejoras de algunos puntos importantes e históricos de la localidad, gran parte de sus habitantes reclaman un mejor apoyo en cuanto a servicios esenciales como el suministro de agua, la electricidad y el asfaltado de las vías, para así satisfacer las demandas de la población.
De acuerdo con los ciudadanos, para esta importante fecha no solamente piden grandes celebraciones, sino también dar respuesta a las situaciones que agobian día a día a la ciudadanía, como la modernización del transporte publico, y a la problemática del Lago Los Tacarigua, que ha impactado la zona sur de la ciudad.
En tal sentido, los maracayeros esperan con ansias ver mejoras significativas en la infraestructura y los servicios públicos, incluyendo la atención de las necesidades de la salud en la población.
Guillermo Granda dijo, «como maracayero deseo lo mejor para la ciudad en este día. Queremos que venga alguien que aprecie a la ciudad como es debido, incluyendo al señor alcalde y a la señora gobernadora. Para mi, Maracay es lo mejor y no la cambiaría por nada».
Keiber Vargas expresó, «Maracay es bonita, colorida, y en su cumpleaños me gustaría que sigan mejorando los espacios. Sí se necesita asfaltado en algunas zonas y alumbrado. Es una ciudad muy bonita, no tiene nada que envidiarle a tras ciudades, tiene sus debilidades pero aún así la seguimos queriendo».
Yackeline Pagua, «mi deseo para Maracay en su día es que primeramente nos volvamos al corazón del Señor. Como ciudadanos queremos que los que están dirigiendo piensen en el prójimo y que trabajen en beneficio de toda la ciudadanía. Maracay es la Ciudad Jardín de Venezuela, con su gente hermosa y amable».
Carlos Zurita, «en este día sólo pido felicidad, que pase un poco la agonía que vivimos día a día como venezolanos. Que todos echemos para adelante trabajando para sacar al país de este hueco, y que los problemas de servicios públicos en la ciudad se resuelvan».
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RESEÑA HISTÓRICA
Para el año 1700, una población de aproximadamente 40 familias se organizaron de manera espontánea alrededor del río Maracay, éstas por intermedio del escritor José de Oviedo y Baños, se dirigieron al Obispo Diego de Baños y Sotomayor, tío carnal del anterior, para que erigiera una feligresía. Petición Otorgada el 5 de marzo de 1701, dándole consistencia al centro poblado de manera oficial.
En los terrenos del conquistador español Sebastián Díaz de Alfaro, luego de fallecer en el siglo XVI, son pasadas las tierras a su hijo Mateo, es así como nace lo que hoy se conoce como Maracay, ubicados al pie de la Cordillera de la Costa, para ese entonces se les llamaba Valles de Tucupido y Tapatapa. En este valle se desarrolló el pastoreo de ganado, la siembra, dada las potencialidades del río Maracay.
La agricultura fue el principal incentivo del florecimiento de la urbe, especialmente el cultivo del añil; de esa planta, usada para teñir telas, se exportaban en grandes cantidades a Europa y proporcionaban proventos (renta) a la Corona, a propietarios y jornaleros.
En 1800, el naturalista y geógrafo alemán Alexander von Humboldt visita la ciudad. La población ya sobrepasaba los 7.000 habitantes y el cultivo del añil estaba en su apogeo. Durante su visita, el biólogo quedó muy impresionado con el pueblo y su gente, vio también el Samán de Güere, y asombrado con su tamaño, creyó al principio que era un cúmulo de árboles; para ese entonces el samán ya tendría 600 años de edad aproximadamente.
Su denominación político-territorial ha sufrido con el paso de los años; para 1814 el Libertador eleva a Maracay a la categoría de Ciudad, en marzo de 1879 Antonio Guzmán Blanco erige la Ciudad con el nombre de Territorio Federal Maracay, en enero de 1898 se le designa por primera vez Capital de estado, en 1917 pasa a ser la capital del estado, aunque se habla de Maracay como villa de la provincia de Caracas, después ciudad de la provincia de Aragua, y luego parte del estado Guzmán Blanco, del Gran Estado Bolívar, y del Gran Estado Guzmán Blanco, para quedar definitivamente capital del estado Aragua.
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¿DE DÓNDE VIENE EL NOMBRE?
Una de las teorías que pretende explicar el nombre de Maracay se asocia al Maracayá, palabra de lengua caribe que designa a un felino que antiguamente habitaba estas tierras (El gato tigre, tigrillo, cunaguaro, caucel, maracayá o margay), aunque también existen otras que pretenden descifrar el misterio del nombre de nuestra ciudad.
HERNÁN GONZÁLEZ | elsiglo
fotos | JOEL ZAPATA
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