Klin Shop: De lo virtual a lo espectacular

“Klin Shop” nació de una forma muy particular, fue en principio una tienda virtual, pero Franklin Abreu ha logrado convertir este emprendimiento en una tienda física.

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Oriundo de Puerto Ayacucho, y estudiante de comunicación social en la Universidad Bicentenaria de Aragua, este joven una vez se encontró con una vieja amiga que lo motivó a iniciar su emprendimiento.

Franklin Abreu

“Una vez visitando mi pueblo me encuentro con una amiga que estudió en la ciudad de Valencia, allí empezamos a conversar de cómo hacía ella para ayudarse, en esa oportunidad me comentó que tenía una tienda virtual, donde a través de la red social de Instagram, vendía accesorios para mujeres”.

Le llamó la atención por la necesidad de costear sus estudios; “me comentó que con esa tienda cubría el 50% de los gastos, por lo que rápidamente le dije que yo tenía que hacer lo mismo”.

Al regresar a Maracay empezó a trabajar en su tienda virtual, pero de accesorios para caballeros, “así comenzó Klin Shop, hacía entregas cerca del lugar donde resido o en mi trabajo, esforzándome para que la página fuera creciendo poco a poco”.

Y es que tanto esfuerzo valió la pena, pues la cuenta creció como nunca se lo imaginó; la tienda “se ha convertido en esa plataforma que me permite poner en acción todo lo que he aprendido en la universidad, fue un gran complemento”.

CRISTALIZACIÓN DEL SUEÑO

Con mucho orgullo, Franklin Abreu relató que después de 8 meses logró convertir su sueño en tienda física, “seguimos vendiendo por Internet, nunca dejaremos nuestra esencia, seguimos vendiendo accesorios para caballeros y además nos hemos ampliado y vendemos accesorios para damas, pero nuestro fuerte es el área para caballeros”.

Este emprendimiento además lo ha ayudado a conocer muchas personas maravillosas, “compartimos, los ayudo y busco siempre conocer personas nuevas, además nos hemos motivado a participar en bazares, lo que nos ha permitido conocer más personas que siempre nos traen algo positivo a esta historia”.

Y la evolución de Klin Shop ha sido tal que ahora entrega los accesorios en bolsas personalizadas, “uno se va colocando metas, las cuales se van cumpliendo, le dedico 24/7 a esta tienda, mi esencia está plasmada en cada prenda”.

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Por último, Franklin Abreu manifestó que el emprendedor debe intuir el momento de pasar de lo virtual a lo físico, “no escuchen las críticas, no dejen sus sueños atrás, luchen por ellos cada día, construyan cada día metas y supérense a ustedes mismos”.

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