En las carnicerías ya se está haciendo una costumbre el uso del dólar, lo que incluso está haciendo asumido con gran naturalidad por la clientela, que no ve problemas en calcular el precio de esta forma.
Esta tendencia ha resultado un alivio para los carniceros, que así al menos logran controlar un poco más las posibles pérdidas, y apuntalar ganancias.
En este sentido, Joana Núñez manifestó que el aumento en los pequeños comercios se realiza cuando los mayoristas o distribuidores hacen sus ajustes, “si ellos nos mantienen los precios, nosotros también, pero el problema radica en que los mismos ya están dolarizados, pero si los aumentan nosotros también tenemos que hacerlo para no tener pérdidas”.
Destacó que para muchos ciudadanos se les ha hecho más fácil entender las cifras en dólares que en bolívares, “tener los precios marcados en divisas ayuda para no aumentar a diario, así las personas manejan y entienden mucho mejor la situación”.
Asimismo, José Luis Espidea mencionó que en el local donde labora se encuentran vendiendo la carne en moneda nacional, manteniéndose el costo sobre los 10 millones de bolívares por kilo.
Espidea manifestó que la venta de carne han estado un poco floja, “ya las personas no compran un kilo, lo que más se llevan es medio kilo y hasta 250 gramos de carne, pero en general no están aumentadas”, finalizó.
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fotos | JOEL ZAPATA
