La policía de Hong Kong reafirmó este lunes que no tolerará el ultraje de los símbolos patrios y aplicará todo el peso de la ley para sancionar a quienes ultrajen los emblemas de la nación.
En este sentido, el superintendente de la policía hongkonesa, Kong Wing-cheung, señaló que «es una ilegalidad destruir intencionalmente o insultar de cualquier modo los emblemas del país y por tanto se responderá a tales acciones en concordancia con las legislaciones establecidas», reseñó Prensa Latina.
Estas aseveraciones del funcionario surgieron luego de que manifestantes quemaron banderas de China en las protestas de este fin de semana, donde grupos extremistas tomaron las calles, paralizaron el transporte y afectaron la infraestructura de la región administrativa especial.
Por la blasfemia a la bandera china, 82 personas fueron arrestadas este fin de semana y además se les imputaron los cargos de portar armas, atacar a la policía, reunirse en público sin permiso, conducir de forma peligrosa y mal comportamiento.
De acuerdo con las normas locales, las ofensas a los símbolos del estado asiático se castigan con tres años en prisión y una multa de 50 mil dólares hongkoneses (6.400 dólares).
La agencia Xinhua condeó el acto de los manifestantes y criticó en su editorial que «no es solo un hecho intencional que quebranta la ley, sino un insulto a todo el país, la raza y el pueblo chino en general».
AVN
