Mató a su abuela de un tiro en el pecho luego de haber discutido con su abuelo

Según deudos, a Norberta Díaz de Ibáñez, de 72 años de edad, la mató de un tiro en el pecho su nieto Winder Alexander Requena, de 23 años de edad. El trágico suceso se registró la planta baja, en el interior de la casa de dos niveles, signada con el número 33 de la Escalera 14, barrio La Cruz, sector Maca de la parroquia Petare, municipio Sucre del estado Miranda, al este del Distrito Capital.

mató a su abuela en Petare
foto referencia

Familiares que tramitaban la entrega del cadáver en la medicatura forense de Bello Monte, indicaron que en la planta baja de la casa vivía la anciana con su esposo, de nombre Miguel, de 59 años de edad. Y en la parte superior reside una de las hija de la señora con sus tres hijos trillizos, menores de edad.

Un pariente de los ancianos dijo que Winder era mala conducta, a tal punto que los miembros del Consejo Comunal lo denunciaron ante la policía, luego que fue acusado de haber ingresado a una vivienda del sector y efectuado un hurto. Además de ser consumidor de drogas.

Fue apresado por lo del hurto y estuvo preso seis meses en la Penitenciaría General de Venezuela (PGV), estado Guárico y un año y medio en el Rodeo III, cárcel ubicada en la población de Guatire, estado Miranda,

El homicida, de padres divorciados, fue criado por su abuela, quien siempre lo visitaba cuando estaba en prisión. Al salir en libertad, estuvo viviendo, en el sector pero con su padre, que al parecer lo echó de la residencia porque notó que andaba en malas compañías y en malos pasos, pese a que el expresidiario aseguraba que en la cárcel se convirtió en cristiano.

Luego se fue a vivir en la casa de un hermano, quien también lo corrió a los pocos días al percatarse que Winder cometía fechorías. Su abuela sí lo recibió y según familiares lo consentía. La anciana tenía esperanza que cambiara porque el joven había conseguido una novia, pese a tener un bebé que no es de Winder.

La hija de la señora Norberta que residen en la parte alta de la casa, siempre le decía a su mamá que se le estaban perdiendo cosas de valor y sospechaba de Winder, pero la abuela defendía a su nieto.

El pasado lunes, la hija de Norberta se despertó a eso de las 3:50 de la madrugada, para poner a cargar la batería del móvil celular. Pasadas las 8:00 de la mañana, al levantarse y arreglarse para ir a sus labores, se percató que su teléfono no estaba en su sitio.

Habló con su mamá y la señora volvió a defender a Winder, que ya había abandonado la casa en compañía de su novia. La madre de los trillizos se fue a sus labores. En horas del mediodía al regresar el sospechoso, su abuela lo interrogó sobre el teléfono de su hija y el hombre negó haberse apoderado del aparato, pero comenzó a gritarle improperios a su abuela. En eso intervino el abuelo, quien lo regaño, pero también recibió su dosis de groserías y falta de respeto. El anciano se apoderó de un tubo y le dio varios golpes al nieto, que maldiciendo abandonó la casa.

Minutos después regresó con un arma de fuego. Insultó al abuelo, quitó el seguro del arma y apuntó al señor. Cuando tenía el dedo en el gatillo, la señora se interpuso, como un escudo para proteger a su esposo y recibió el tiro en el pecho.

El hombre abandonó la casa

El mayor de los trillizos, que había escuchado el escándalo, en el interior de la casa, al salir y ver en la señora en el piso, salió a la calle gritando: “La mató, la mató”. La señora fue auxiliada y en una motocicleta la trasladaron al Hospital de los Seguros Sociales Dr. Domingo Luciani, pero ingresó sin vida.

El homicida, hasta la tarde de este martes no había sido capturado, aunque algunos aseguraron haberlo visto armado por sectores de Petare.

 

 

EFRÉN PÉREZ HERNÁNDEZ | elsiglo