Mototaxistas victorianos se las ingenian para sobrevivir

Hacer una “carrerita” en las conocidas “Mototaxis” se ha convertido en una completa odisea, esto debido no sólo a los problemas con el efectivo, sino a la tarifa puesta por los prestadores del servicio, quienes alegan que el costo de los repuestos está cada vez más inaccesible.

Virginia de Fajardo, usuaria

En este sentido, uno de estos trabajadores del manubrio de nombre Aníbal Flores, aseguró que la cantidad de unidades con el pasar del primer semestre del año, han disminuido de manera considerable, puesto que todos no cuentan con los ingresos para mantener las motos en óptimas condiciones y prefieren simplemente pararlas, antes que el daño sea mayor.

Asimismo, indicó que otra de las dificultades que los aqueja en su desempeño es la falta de efectivo, por lo que en muchos casos se han visto en la obligación de ingeniárselas para conseguir el pago.

“Ya nuestros trabajadores están tomando en cuenta la modalidad de pago móvil, transferencia y dependiendo del conductor pueden hasta recibir pagos con rubros alimenticios o productos que para el momento no se consigan, pues la necesidad es grande. Es una realidad que ha golpeado a las líneas que aún quedamos trabajando en la ciudad”, dijo.

Jonathan Ramos, quien presta el servicio desde hace cinco años expresó: “Como todos, nosotros también tenemos necesidades y al no ver que tenemos ingresos debemos buscar qué hacer y si el cliente ofrece otras facilidades, debemos estudiarlas y dependiendo del caso aceptarla. Tenemos familias que llevamos sobre nuestros hombros”.

Por otra parte, los usuarios comentaron que estos servicios estaban quedando en el olvido, ya que en la actualidad el poco dinero que tienen lo están utilizando para la compra de alimentos y medicinas.

Las alternativas de pago están a la orden de los usuarios.

“Ya caminar se me ha vuelto costumbre, porque no hay efectivo ni para el pasaje. Entonces prefiero caminar, hago cardio y de paso me ahorro ese dinero que puedo usar en otras cosas más importantes”, aseguró Virginia de Fajardo.

 

Sin embargo, otro ciudadano como Antoni Valenzuela aseveró que en ocasiones hacen uso de las carreritas para emergencias. “Este es un servicio que sólo se está usando en casos de necesidad y no queda de otra que hacer un sacrificio. Sale más barato pagar 150 en efectivo, que 500 mil bolívares en un taxi y llegas más rápido”.

Entre tanto los precios por carrera sólo en La Victoria, están entre los 150 mil bolívares en efectivo y 500 por punto o pago móvil, dependiendo de la distancia.

 

DANIEL MELLADO| el siglo
fotos | ROYNER APONTE