Habitantes y comerciantes de la calle 8 de Caña de Azúcar, entre los sectores 6 y 8 de Mario Briceño Iragorry, denunciaron un vertedero improvisado de basura que afecta gravemente a la comunidad y los negocios de la zona.
Los lugareños expresaron que esta situación es en parte culpa de algunos vecinos y la otra parte culpa de los encargados de la Alcaldía de recoger la basura, ya que esto siempre debería ser un trabajo mancomunado.
Partiendo de la premisa de que el aseo no pasa con la frecuencia que debería por las calles del municipio, las personas que viven en los edificios se ven en la necesidad de sacar la basura de sus apartamentos e incluso de los edificios, ya que se encuentran en espacios reducidos y el mal olor se concentra, creando dichos vertederos improvisados.
«Si no vienen a recoger la basura la gente busca donde echarla, entonces cuando los camiones vienen a recolectarla deben tocar corneta desde que entran para que la gente baje con la basura», manifestó Eglese González, comerciante de la zona.
Aparte de esto, comentaron que hay personas que no tienen conciencia sobre esta problemática, porque bajan a botar la basura minutos después de que el camión de la basura pasa, además de esto, la dejan de manera desordenada, de modo que perjudica los locales de comida.
Acto que calificaron de injusto, porque ese es el sustento de su familia y todos los días deben recoger basura del frente de sus puestos de ventas y echarla al vertedero, para así evitar que se contaminen sus negocios.
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Preocupación por la proliferación de enfermedades
Esto también es una situación que mantiene preocupados a los vecinos, ya que el olor, las moscas y los roedores que atrae esta basura es perjudicial para la salud de los lugareños, tomando en cuenta que muchas familias tienen niños pequeños, recién nacidos y adultos mayores.
«Ahorita que se acercaron las lluvias esto puede generar enfermedades, contaminación del ambiente y pare usted de contar, hay un brote de dengue», destacó Gladys Infante.
Asimismo, consideraron que aunque se tiene que hacer un trabajo de conciencia con los mismos vecinos de la zona, también el aseo debería pasar con mucha más frecuencia para así evitar la acumulación de basura.
«El aseo a veces no pasa y la gente tiene que tomar acciones de poner esa basura ahí para que ellos se preocupen de pasar a recogerla, porque ellos también me imagino que deben tener su casa llena de basura», enfatizó la señora Miryam Carrasquel.
Finalmente, hicieron un llamado de conciencia tanto para los habitantes de la comunidad como a los entes municipales encargados de la recolección, a tomar cartas en el asunto para evitar generar focos de basura, expresando que ya no se trata de si se ve bonito el municipio, sino un tema de higiene colectivo.
ALEJANDRA BUITRAGO | elsiglo
fotos | JOEL ZAPATA
JAS
