Uno de los colonos israelíes sospechosos de asesinar el viernes pasado a un palestino en Cisjordania ocupada salió de la cárcel y fue puesto en arresto domiciliario este martes, una decisión que, según la Autoridad Palestina, “alienta a colonos terroristas a cometer más ataques”.
El Ministerio de Exteriores de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) condenó “en los términos más enérgicos la decisión de la justicia israelí de liberar al terrorista extremista Elisha Yered”.
La decisión del Tribunal de Primera Instancia de Jerusalén “es provocativa y alienta a los colonos terroristas extremistas a cometer más asaltos y ataques contra las ciudades palestinas y sus ciudadanos, y da a las organizaciones terroristas de colonos judíos una mayor sensación de protección e impunidad”, añadió.
Arresto domiciliario
Por su parte, la Policía de Israel presentó una apelación contra la excarcelación de Yered ante el Tribunal Supremo, que revisará la solicitud mañana miércoles.
Yered y Yehiel Indore, habitantes de Migron, un asentamiento judío establecido en Cisjordania sin autorización el gobierno israelí, fueron arrestados por ser sospechosos del asesinato a tiros de Qusai Jamal Matan, un palestino de 19 años.
El crimen ocurrió el 4 de agosto durante enfrentamientos entre colonos israelíes y palestinos a las afueras de la ciudad cisjordana de Burqa, cerca de Ramala.
Los choques comenzaron cuando civiles israelíes llegaron con sus ovejas a una zona adyacente a Burqa, donde los palestinos trataron de repelerlos, y tras enfrentamientos verbales y lanzamiento de piedras de ambos bandos, los palestinos detonaron fuegos artificiales y los israelíes dispararon armas de fuego, según el Ejército israelí.
Además de Yered e Indore, otros cinco colonos israelíes los han detenido por los disturbios.
Enfrentamientos
Según la ANP, el Ejército israelí “brindó protección y apoyo” a los colonos durante los enfrentamientos, “disparando balas y gas lacrimógeno contra los ciudadanos palestinos que defendían sus tierras, propiedades y hogares”.
Indore -actualmente hospitalizado en estado grave tras los enfrentamientos- disparó el arma que mató a Matan, mientras que Yered la escondió, según las investigaciones preliminares.
Yered era ayudante de la legisladora israelí Limor Son Har-Melech, del partido de extrema derecha Poder Judío, liderado por el ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, un colono conocido por su retórica racista antiárabe.
Condenado en el pasado por vandalismo, incitación a la violencia y apoyo a organización terrorista, Ben Gvir consideró que Yered e Indore “merecen una medalla” y son “héroes”.
Actos terroristas
Pero el portavoz del Ejército israelí, el contralmirante Daniel Hagari, afirmó ayer que las crecientes agresiones de colonos en Cisjordania ocupada son “terrorismo”, y que incitan a los palestinos a cometer más “actos terroristas”.
La violencia colona se ha disparado en el último año y en los primeros seis meses de 2023, la ONU documentó 591 incidentes relacionados con colonos que resultaron en víctimas palestinas o daños a la propiedad o ambos, un aumento del 39% frente al mismo periodo de 2022, cuando ya se había registrado el número más alto de incidentes desde que la ONU inició el registro en 2006.
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En lo que va de este año, 10 palestinos han muerto y cerca de 2.000 han resultado heridos en Cisjordania durante incidentes violentos con colonos, según la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios, OCHA.
Sin embargo, muchos de estos crímenes terminan sin procesos o sentencias condenatorias para los agresores.
MV
