Justin Fashanu y el Día Internacional Contra la Homofobia en el Deporte

El 19 de febrero se conmemora el Día Internacional Contra la Homofobia en el Deporte como forma de tributo a Justin Fashanu.

Desde que Fashanu salió del armario como el primer futbolista profesional abiertamente gay en 1990, su historia ha servido como un recordatorio de la discriminación que las personas LGBTQ+ aún enfrentan y una fuente de inspiración a los futbolistas que han salido del armario.

Justin Fashanu

La vida de Justin Fashanu

Justin Fashanu nació en Londres en 1961, hijo de una pareja de inmigrantes nigeria. A los 11 años, ingresó al centro de formación del Norwich City FC y, aunque no logró ser seleccionado para jugar en la Premier League, tuvo una exitosa carrera como jugador de fútbol en Europa.

En 1990, Fashanu salió del armario y fue el primer jugador profesional de fútbol en hacerlo públicamente. Sin embargo, esto no fue bien recibido por todos y su carrera comenzó a decaer. En 1998, tras ser acusado de agredir sexualmente a un menor de edad, Fashanu se suicidó. Tenía 37 años.

Era el único futbolista abiertamente gay en la historia del fútbol y en aquel entonces, su carrera estaba en declive. Justin había salido del armario públicamente a los 29 años y desde entonces, luchó contra la homofobia tanto dentro como fuera del campo. A pesar de ser un jugador talentoso, nunca logró cumplir con su potencial debido en parte a la homofobia que enfrentaba.

Aunque, tal y como informan en The Stonewall, fue una figura pionera para los deportistas LGBT, Justin no recibió el apoyo que necesitaba durante su vida y murió sin sentir que podría haber sido aceptado por la comunidad deportiva.

El legado de Justin Fashanu

Desafortunadamente, el legado de Justin Fashanu es uno de tristeza y dolor. A pesar de ser un jugador talentoso y un icono gay, fue víctima de la homofobia tanto dentro como fuera del mundo del fútbol. En 1998, Fashanu se suicidó a los 37 años, dejando una nota en la que hablaba de su lucha contra la homofobia y que decía: «Me he dado cuenta de que ya he sido condenado como culpable. No quiero ser más una vergüenza para mis amigos y familia […] espero que el Jesús que amo me dé la bienvenida y finalmente encuentre la paz». Aunque hubo intentos por parte de la comunidad LGBT+ para rendirle homenaje, el deporte todavía tiene mucho que hacer para erradicar la homofobia.

A pesar de las dificultades que enfrentó durante su vida, Justin Fashanu fue un pionero al ser el primer futbolista abiertamente gay. Su valentía inspiró a otros jugadores gay para que salieran del closet y lucharan contra la homofobia en el deporte. Hoy en día, aunque todavía existe mucha homofobia en el fútbol, se ha hecho mucho progreso desde los tiempos de Justin Fashanu.

La homofobia en el fútbol

Desde el asesinato de Justin Fashanu en 1998, la homofobia en el fútbol ha sido un tema tabú. A pesar de que la Federación Internacional de Futbol Asociación (FIFA) tiene un código ético que prohibe la discriminación, el racismo y otras formas de intolerancia, el problema persiste. Según Stonewall, una organización benéfica para lesbianas, gays, bisexuales y transexuales (LGBT), el 84% de los aficionados al fútbol oyen gritos homófobos en los estadios. El 54% dijo que había visto a otros aficionados hacer gestos homofóbicos. Y el 75% cree que no se hace suficiente para detener este comportamiento.

A pesar de estos números inquietantes, se están tomando medidas para combatir el problema. En 2012, el Comité Olímpico Internacional aprobó una política de «no discriminación» que requiere a todos los participantes de los Juegos Olímpicos no solo respetar la diversidad sino también luchar contra la homofobia. Algunas ligas profesionales también han empezado a tomar medidas enérgicas para evitar los incidentes homofóbicos.

Es evidente que todavía hay mucho por hacer para erradicar la homofobia del fútbol. Sin embargo, es importante recordar que la lucha contra este tipo de comportamiento no es responsabilidad solo de las organizaciones deportivas, sino también de los aficionados y jugadores. Cada uno puede hacer su parte por construir un mundo libre de prejuicios.

Los efectos de la homofobia en el deporte

En muchos deportes, la homofobia sigue siendo un problema grave. Los jugadores y entrenadores homosexuales a menudo se enfrentan a abusos verbales y físicos, y a veces incluso son excluidos de sus equipos o ligas. Esto puede tener un efecto profundo en la salud mental y el bienestar de los homosexuales, especialmente los jóvenes.

La homofobia en el deporte puede manifestarse de diversas maneras. Algunos jugadores y entrenadores homosexuales han sido objeto de insultos homofóbicos por parte de otros jugadores o aficionados. También han sido víctimas de agresiones físicas. En algunos casos, han sido excluidos de sus equipos o ligas deportivas debido a su orientación sexual.

Esto puede tener un efecto muy negativo en la salud mental y el bienestar de los homosexuales, especialmente si son jóvenes así como incrementar los riesgos de tentativa de suicidio. Además, la homofobia impide progresar a muchos profesionales en sus carreras deportivas o incluso simplemente disfrutar del juego.