Con 18 años entregados al baloncesto, Yosimar Corrales pide más apoyo al básquet femenino, para que sus jugadoras lleguen a ser reconocidas en el país y cada día más niñas sigan este ejemplo.
Nacida en Turmero, en el seno de una familia ligada al deporte, Corrales expresó que siempre ha tenido el apoyo de sus padres, “me inicié en la práctica deportiva entrenando karate, a pesar de que me gustó y me sentía bien, seguía jugando con mis hermanos, ya que he tenido facilidad para todas las disciplinas, como el béisbol, fútbol y por supuesto el baloncesto”, detalló Corrales.
Recuerda que sus inicios se dieron jugando en una cancha detrás de su casa en Turmero, municipio Santiago Mariño, allí estuvo un tiempo entrenando con un equipo masculino, bajo las indicaciones del entrenador Yorman Luna, quien reconoció su talento y la remitió a la ciudad de Maracay a un equipo femenino que estaba ubicado en La Barraca y era dirigido por Jhony Barragán.
“Se podría decir que mi despegue en el baloncesto fue aquí en Maracay de la mano de Jhony, quien me apoyó no sólo en lo deportivo, también me ayudó a crecer en lo personal y desde ese momento mi carrera cambió y comencé a cosechar éxitos”, destacó la deportista.
Estos logros deportivos se vieron concretados cuando con tan sólo 15 años recibió el llamado a integrar la selección de baloncesto de mayores, que participó en un Campeonato Sudamericano, siendo este evento una ventana para impulsar su carrera a nivel profesional.
DEJANDO ATRÁS LOS ESTEREOTIPOS
Corrales señaló que muchas personas le han preguntado porqué eligió este deporte, que en su momento no era muy practicado por las chicas, “el baloncesto me enamoró desde que comencé a practicarlo, por eso no le hice casos a los estereotipos que había para el momento, nunca he mostrado miedo, para hacer lo que me gusta, si me hace feliz simplemente lo hago y lo disfruto, eso me ha pasado con el baloncesto y espero seguir practicándolo por los menos cuatro años más”, detalló.
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Recordó que su familia le mostró su apoyo desde que decidió convertirse en una jugadora de baloncesto, “mi padre era quien se resistía un poco por el miedo de que me fueran a dar un mal golpe, pero después entendió y se ha convertido en un gran apoyo en mi carrera”, explicó.
La jugadora agradeció que estos estereotipos se han dejado atrás y cada día las mujeres han podido consolidar carreras a nivel profesional en diversos deportes, esto debe ser un ejemplo a las niñas que no hay límites para realizarse en lo que les guste.
UNA CARRERA EN EL BALONCESTO
Corrales señaló que las múltiples representaciones nacionales le permitieron viajar y conocer a muchas figuras del deporte, esto la fue animando a dar un salto al profesional y hacer carrera deportiva.
“Estando en España se me acerca un reconocido agente con muchas relaciones en el país, entre ellas con jugadores criollos, gracias a esta relación comencé a recibir ofertas para jugar baloncesto profesional, obteniendo un contrato de Obras Sanitarias en Argentina”, recordó.
Esta oportunidad la consolidó como una de las mejores alas-pívot del torneo argentino y le sirvió para participar varias temporadas en el país suramericano, dejando buenos números y abriéndoles camino a más venezolanas que han optado por esta profesión.
Actualmente, Corrales juega para las Cayenas de Carabobo en la edición de la Superliga Profesional de Baloncesto femenina, este equipo es de José “Grillito” Vargas, con quien confiesa tener una relación de hermandad.
“A José lo conozco desde hace muchos años, tenemos una gran relación de amistad y me contenta mucho que haya apostado por apoyar este proyecto de Cayenas, donde se le da oportunidad a muchas jóvenes de dar sus primeros pasos en el baloncesto profesional”, añadió Corrales.
En cuanto a la Superliga Femenina, la jugadora agradeció el empeño de Anthony Coello, presidente de la Federación venezolana de Baloncesto, de impulsar esta iniciativa que sirve para que esta disciplina siga creciendo, aun cuando falta mucha difusión y promoción, lo importante es que se están dando los primeros pasos.
TRABAJANDO PARA EL FUTURO
La deportista señaló que aún espera mantenerse en juego unos cuatro años, “mantener el nivel es difícil; sin embargo, estoy trabajando en ello, y espero que mi cuerpo me responda, de igual forma tengo algunos proyectos, como es invertir en el sector transporte donde mi familia se ha desempeñado por muchos años y trabajar junto a ellos”, añadió.
Otro de los deseos de Corrales es dedicarse al área de la salud deportiva, “me llama mucho la atención, el tema de la fisioterapia, también el punto del personal training, son temas bien llamativos y en lo que me gustaría especializarme después de retirarme de mis compromisos deportivos”, apuntó.
Reconoce la jugadora que uno de los temas donde no ha podido dedicarle más tiempo es al de fomentar esta disciplina y orientar a las nuevas generaciones con clínicas y talleres. “Siempre he tenido la disposición de realizar estas jornadas, pero el tema de agenda, las concentraciones y entrenamiento me han limitado, sin embargo, siempre que puedo comparto con los más pequeños y les brindo la orientación para seguir creciendo en este deporte”, enfatizó.
UN MENSAJE A LAS NUEVAS GENERACIONES
Aun cuando no se siente atraída por ocupar cargos en la Asociación de Baloncesto o la Federación, Corrales señaló que de la mejor manera en que ella puede ayudar a las nuevas generaciones es enseñándoles que este camino es largo y difícil, pero que no se rindan, porque Dios tiene preparadas para nosotros muchas cosas, que el trabajo fuerte da grandes frutos, además que hay que cuidarse y mantenerse sanas, pero sobre todo hay que valorarse, de esta forma concluyó la jugadora.
MAURICIO BOLÍVAR | elsiglo
