Empresas españolas estiman caídas de 45% en primer trimestre de 2021

Una encuesta a las empresas españolas sobre la evolución de su actividad en el 2021 elaborada por el Banco de España, revela que el 45,4 % de las sociedades no financieras estiman una caída de su facturación en los meses de enero, febrero y marzo de este año, tras evaluar el impacto negativo del covid-19.

Empresas españolas estiman caídas de 45% en primer trimestre de 2021
Foto: Referencial

Este sondeo de opinión contó con la participación de más de 4 mil empresas, revelando que sólo el 13,3% de los consultados mantiene las esperanzas por una mejora en la economía.

Al comparar este trabajo publicado por Reuters con otra encuesta presentada en el mes de noviembre 2020, se puede evidenciar un empeoramiento en la valoración del último trimestre y las expectativas en torno a estos primeros tres meses del año 2021.

Sin embargo, las autoridades empresariales proyectan una recuperación para el segundo trimestre de este año, para lo cual se espera un ascenso de facturación del 32,6% , que supera a los que optaron por un posible deterioro del 23,2%.

Al discriminar la afectación por sectores, el resultado de este trabajo revela que las empresas del sector servicios, como la hostelería, el ocio y el entretenimiento, registran una posición menos optimista con respecto a la evolución en este trimestre por las medidas restrictivas que han mermado la actividad comercial.

Con respecto a la adopción de medidas mucho más drásticas ante el acrecentamiento de los casos por Covid- 19, la mayoría de los consultados consideran oportuno para enfrentar esta nueva modalidad trazada por la pandemia, invertir en nuevas tecnologías y optar por el teletrabajo.

Además, las empresas más pequeñas plantean que podrían enfrentar más dificultades para poder recuperar a trabajadores en ERTE o abrir nuevos mercados.

Entre tanto, las empresas de menor tamaño esperan recurrir comparativamente en mayor medida que las medianas y las grandes a la reducción de inversiones ya planificadas, la petición de nuevas líneas de financiación al ICO, el ajuste de la jornada o del salario de sus trabajadores y, en último extremo, el cese de su actividad.

AVN