Policía de Bolivia investiga posibles entierros clandestinos en área rural

La Policía Boliviana investiga la posibilidad de que se estuvieran realizando entierros clandestinos de personas fallecidas por COVID-19 o con síntomas de la enfermedad en comunidades rurales aledañas a la ciudad de La Paz.

Policía  de

El director departamental de la Fuerza Especial de Lucha contra el Crimen (FELCC) de La Paz, Juan Luis Cuevas, sostuvo que hay «tranquilidad» y a la vez «preocupación» porque no ha aumentado la cifra de levantamientos de cadáveres de fallecidos con sospechas de COVID-19 o que tuvieran la enfermedad.

Esto podría significar que la gente se está cuidando más para evitar los contagios o que podrían estar sepultando clandestinamente a los muertos, explicó Cuevas, según un comunicado del Ministerio de Gobierno (Interior), del que depende la Policía.

Los agentes investigan lo que ocurre bajo «varias hipótesis», según el jefe policial.

«Una de las principales hipótesis que tenemos es que, posiblemente, algunos podrían estar sacando a sus familiares ya fallecidos a los pueblos cercanos a la ciudad de La Paz para poderlos enterrar en forma clandestina», manifestó Cuevas, según el comunicado.

Por ello, la FELCC inició controles en puestos de peaje y también desplazó personal de inteligencia, con el fin de encontrar «en flagrancia» a quienes estén actuando de esta forma.

Según Cuevas, se tienen algunos nombres de localidades rurales donde se podrían estar realizando estos sepelios clandestinos, pero los mantienen en reserva para no entorpecer las investigaciones.

Bolivia acumula 4.791 fallecidos y 113.129 casos confirmados del nuevo coronavirus desde que los primeros contagios se detectaron a principios de marzo en el país, que tiene unos once millones y medio de habitantes.

Los picos más altos de fallecidos y contagios se registraron en los dos últimos meses, con un récord diario de 2.036 casos confirmados el 18 de julio y 96 muertos el 4 de agosto.

El departamento de La Paz es la segunda región boliviana más afectada por casos de la COVID-19 en Bolivia, con 29.851 contagios, detrás de los 40.014 que suma la oriental Santa Cruz.

El Gobierno transitorio boliviano decidió que a partir de septiembre el país pase de la cuarentena decretada en marzo por la COVID-19 a lo que denomina una fase de «posconfinamiento», con menos restricciones a fin de que se recupere la economía después de cinco meses.

EFE