Pistoleros asesinaron a vigilante mientras dormía en sitio de trabajo

Entre la noche del miércoles y la madrugada de este jueves, sujetos aparentemente desconocidos dieron muerte a un vigilante en su sitio de trabajo, ubicado en la Intercomunal Turmero-Maracay, frente a las instalaciones del Centro Hispano Venezolano en sentido a la Encrucijada de Turmero.

vigilante
Funcionarios de las FAES buscan a los homicidas

La víctima de ese acto criminal fue identificada como Luis Fontiveros, de 51 años de edad, padre de varios hijos y domiciliada en Palo Negro del municipio Libertador, estado Aragua.
Las averiguaciones del caso quedaron en manos de los sabuesos de la Base de Homicidios en San Pablo Turmero, y los funcionarios de las Fuerzas de Acciones Especiales, grupo élite de la Policía Nacional Bolivariana.

Sobre los hechos se manejan varios planteamientos, según las fuentes consultadas por los periodistas, y los investigadores colectaron los videos registrados en las cámaras ocultas instaladas en esa zona comercial. Los pesquisadores manejan pistas.

ORIGEN DEL ASUNTO

Indagando sobre el suceso, se permite señalar que los autores materiales del homicidio son dos jóvenes que no pasan de los 25 años de edad. Se presentaron a ese sitio en una motocicleta y estando frente a la concesionaria Mackey´s Motors, dispararon a la santamaría en repetidas ocasiones.

Luego que ejecutaron el acto delictivo, los individuos emprendieron la huida con rumbo desconocido. Residentes de la zona y sectores aledaños presumieron que los disparos se debían a una acción de gatillos alegres, y le restaron importancia al asunto.

SORPRESA A LA VISTA

Desde ese momento de los disparos, la cosa pasó desapercibida, y este jueves aproximadamente a las 9:30 de la mañana, se presentó un ciudadano conduciendo un camión de plataforma, de color blanco, NPR, cuya unidad sería estacionada en ese inmueble.

Los rostros de los homicidas quedaron registrados en las cámaras de seguridad
Los rostros de los homicidas quedaron registrados en las cámaras de seguridad

El camionero había concluido con sus labores y como estamos sometidos a la cuarentena por nuestra salud, en aras de evitar la propagación del Covid-19, quería dirigirse a su residencia a descansar un poco del ajetreo diario.

La persona, de quien se desconoce su nombre, tocó la corneta del vehículo en repetidas ocasiones alertando al vigilante para que le abriera la santamaría y así estacionar la unidad en su sitio asignado.

Al no responder al llamado, el ciudadano se bajó del camión y se dirigió a la puerta, tocándola fuertemente. Sin embargo, el vigilante seguía sin atender a sus funciones diarias.

Ante ese silencio, el conductor observó algo extraño en la santamaría, en donde visualizó y contabilizó al menos 11 perforaciones de proyectiles y en la parte de afuera del negocio se observaron los casquillos.

Se preguntó lo siguiente: “¡Cónchale! Aquí pasó algo, y debo comunicar de inmediato al patrón”. A través de su celular, el hombre notificó lo que estaba sucediendo en la concesionaria, y el dueño de la misma le ordenó que abriera la puerta para cerciorarse porque el vigilante no atendía a sus funciones.

Así lo hizo el camionero y comenzó a inspeccionar todas las áreas, y finalmente se dirigió al fondo del local, un sitio donde descansa el personal de seguridad.

Su mayor sorpresa fue que el ciudadano consiguió a Luis Fontiveros acostado y con un disparo en la cabeza. Lo hamaqueó varias veces y al ver que estaba muerto, se comunicó de nuevo con su jefe.

– “Patrón, Luis está muerto”, habría reportado.

Seguidamente, el transportista estableció contacto con los funcionarios de las Fuerzas de Acciones Especiales y éstos luego de confirmar la noticia, se comunicaron con la gente del Cicpc.

Las unidades de investigación de homicidios se dirigieron al sitio procediendo a levantar el cadáver y de inmediato lo trasladaron a la Morgue de Caña de Azúcar para la autopsia de ley, así como también vieron los videos y tomaron las primeras declaraciones.

ADVERTENCIA

Por otro lado, se tuvo información preliminar que los disparos propinados por los motorizados contra la fachada del local, se debió a un acto de amedrentamiento por el cobro de vacunas.

Se dijo que el regente del establecimiento estaba siendo objeto de un acto de extorsión, en donde le exigían a pagar una fuerte suma de dinero o de lo contrario, que asumiera sus consecuencias.

Y lo ocurrido entre la noche del miércoles y la madrugada de ayer fue como especie de una advertencia. Dejaron un mensaje subliminal: “Pagas o te matamos”.

BIEN SALADO

Como dicen por ahí y es creíble el dicho: “El vigilante estaba bien salado”. Cómo es posible que los delincuentes dispararon desde las afueras de la concesionaria, y uno de los proyectiles fue a parar a la zona de descanso de los vigilantes e hizo blanco en la cabeza de Luis Fontiveros”.

Cosas o casos de la vida real. Por otro lado, se informó que los responsables de ese hecho ya están identificados, y desde ya funcionarios de las Fuerzas de Acciones Especiales realizan una serie de investigaciones para dar con el paradero de los matones.

Los homicidas son buscados hasta “debajo de las piedras” y en cualquier momento habrá respuesta. Los mejores investigadores están montados tras la captura de los cobradores de vacunas.

LUIS ANTONIO QUINTERO | elsiglo
fotos | RAFAEL SALGUERO