Desde hace ocho días, las montañas o las reservas forestales como la fauna silvestre del Parque Nacional Henri Pittier arden en llamas producto de un voraz incendio que ha consumido varias hectáreas, en esa zona considerada como el pulmón principal de la Ciudad Jardín.
Un funcionario de Protección Civil que no quiso identificarse, manifestó que el evento comenzó al inicio de la semana pasada, cuando se originó el fuego en las filas de Coral de Piedra.
Y con el pasar de las horas, las llamas han ido consumiendo especies de la flora e igualmente de la fauna, mientras que cuadrillas de Inparques, bomberos forestales y grupos voluntarios, desde el mismo día de los hechos, se encuentran internados en las montañas tratando de aminorar el impacto.
Sin embargo, la vegetación es muy densa, y las labores de extinción del fuego han resultado desfavorables, dijo el funcionario.
Se requiere imponer un plan de confinamiento de rayado en la zona afectada por la candela y además, echarle agua. Se está estudiando esa alternativa para activarla en las próximas horas.
Por otro lado, vale precisar que los vecinos de los sectores 1 y 2 de Caña de Azúcar, La Candelaria, El Progreso, Mata Seca y El Progreso se vieron seriamente afectados entre la noche del viernes y la madrugada de ayer sábado cuando una densa nube de humo de apoderó del cielo del municipio Mario Briceño Iragorry.
Personas que son asmáticas o presentan alguna patología respiratoria amanecieron ayer con dificultades para respirar y ardor en los ojos, así como otras afecciones.
Los habitantes MBI pidieron a las autoridades municipales y regionales controlar las llamas que consumen las montañas del Henri Pittier, las cuales afectan su salud y más ahora cuando la comunidad mundial es atacada por una pandemia, conocida como el Coronavirus.
De acuerdo al informe de las autoridades oficiales, la cifra de infectados en el país se ubica en 70 personas. Por lo tanto, hay que tomar cartas en el asunto antes de que la situación se complique.
Las comunidades clamaron a los piromaniáticos darle un parao a la quema del reservorio vegetal de los maracayeros.
LUIS ANTONIO QUINTERO | elsiglo
