Para los habitantes del eje Este del estado Aragua no terminan las sorpresas, pues pese a que muchos han perdido la capacidad de asombro con respecto a los altos costos de los productos alimenticios, el elevado precio del ajo ha hecho que más de uno pegue un grito de asombro, ya que el mismo se consigue en más de 400 mil bolívares el kilogramo.
Y es que este condimento es muy imprescindible para las amas de casa en la cocina, ya alcanzó un precio que ha hecho pensar si seguir adquiriéndolo o por el contrario sacarlo de su lista de compras y tratar de sustituirlo con otros condimentos.
Ante este panorama, realizamos un recorrido por las principales calles y avenidas de las cinco entidades que lo conforman, para conocer de primera mano, qué están haciendo las diferentes familias para conseguir este tradicional ingrediente de la cocina venezolana.
Siendo así, que el factor denominador en las opiniones de los encuestados, fue lo costoso del ajo. Sin embargo, el mismo no sale definitivamente del mercado de los ciudadanos, sino que prevalece, pero en pocas cantidades, debido a su excelente sabor característico.
“Realmente yo siempre debo comprar aunque sea una cabecita de ajo, para poder aliñar algunos alimentos. En Venezuela estamos acostumbrados a cocinar con sabor y el ajo lo da, por eso en la medida de lo posible, uno trata de destinar aunque sean 10 mil bolívares para comprar y de ahí queda en cada persona como lo estira”, mencionó la señora Luz Marina Naranjo.
La señora Betty Rivas agregó, “yo compro ajo, pero de a poquito lo que puedo, ya sean 10 o 20 mil bolívares, que es lo que me dura la semana, pero hasta ahí no puedo hacer más, porque tengo más gastos. El secreto está en saber administrarlo para siempre tener un poquito”.
Por su parte, Carola Camacho comentó que ella para poder ahorrar en sabor, ha optado por comprar los ajos en rama, ya que a su parecer tienen el mismo sabor y es mucho más económico. “Verdaderamente no siempre uno puede comprar gran cantidad y ante esta situación, en mi caso yo compro las ramas y alterno. Claro, no en mucha cantidad porque es muy fuerte, pero si ayuda”, aseveró.
En resumidas cuentas, las familias de esta parte del estado Aragua se niegan a olvidar el sabor del ajo, pues ya sea en pocas cantidades o de a dientitos, se llevan a su casa su condimento.
DANIEL MELLADO | elsiglo
