Tras un recorrido realizado por el equipo reporteril del diario elsiglo, este lunes de carnaval, en los comercios del centro de Maracay se pudo constatar que una buena parte de los establecimientos no subieron sus santamarías al público.
Sin embargo, algunos de los lugares que optaron por laborar, dieron como argumento la necesidad de aumentar las ventas del mes, ya que la difícil situación económica obligó a buscar incrementar la entrada de dinero y más con la considerable cantidad de personas en las calles de la ciudad algunos negocios abrieron sus puertas durante mediodía.
En este sentido, algunos de los dueños y encargados de estos sitios expendedores, aseguraron que necesitan aumentar sus ingresos de principios de año y optaron por aprovechar las festividades, ya que a su parecer el descanso no es opción.
Con respecto al tema, el vendedor Miguel Ortiz aseguró que las ventas han estado malas en todo lo que va de año, por lo que no fue opción darse unos días de descanso, ya que como todos necesitan recuperar la inversión y alimentarse.
«La situación está bastante fuerte, es por eso que tenemos que salir a trabajar para ver si podemos ganar un poquito más. Hasta ahora he registrado ventas y eso es lo que queremos producir todos los días», puntualizó.
La señora Mery Acacias agregó, «viajar ahorita está demasiado caro y yo tengo dos niños, por eso prefiero trabajar para darle lo mejor a ellos. Esto sin contar, de que se me puede dañar la mercancía, ya que ni siquiera salió la semana pasada».
Por otra parte, otros encargados manifestaron que estaban aprovechando estos días, donde muchos permanecen con sus puertas cerradas para aumentar sus ventas. «Abrimos porque hoy todos estarán de vacaciones y hay personas que necesitan adquirir productos y si aquí está abierto, podemos brindar el servicio y obtener ganancias que es lo que queremos», aseveró Josefit Wefany.
Finalmente, las tiendas que fueron abiertas al público lo hicieron sólo mediodía, aunque muchos optaron por cerrar sus puertas con anterioridad por la poca cantidad de personas en las calles y los riesgos de ser víctimas de la delincuencia.
DANIEL MELLADO | elsiglo
