De esta manera se puede limpiar un teléfono móvil

Es un producto de alto consumo que ha revolucionado la sociedad y la economía en las últimas décadas. Hablamos del teléfono móvil que en su vida «inteligente» se utiliza continuamente por millones de personas. Constantemente en muchos casos. Y, a veces, no se repara en que va rulando de aquí para allá recogiendo suciedad y gérmenes de todo tipo. Estudios recientes han constatado que un dispositivo móvil de cierto uso contiene más bacterias que el váter de una vivienda media.

El problema viene cuando nos damos cuenta que como quien no quiere la cosa nos ponemos el terminal en la cara para hablar por teléfono, aunque es cierto que cada vez se usa menos para establecer llamadas. Aún así, no nos damos cuenta que cogemos el «smartphone» sin lavarnos las manos, lo depositamos en cualquier superficie, se cae al suelo.

Millones de bacterias se acumulan, y no solo en su pantalla, que en ocasiones pueden producir enfermedades cutáneas como impétigo, celulitis infecciosa o incluso otitis externa. O, incluso, incluir cepas de infecciones tales como E. coli y salmonela.

Dicho esto, llevar un cierto control higiénico de este producto que llevamos a cuestas es fundamental no solo por salubridad del usuario sino también por su correcto funcionamiento. Según recomendaciones difundidas en «Popular Science», es importante mantener alejado los productos abrasivos comunes (lejías, detergentes, productos de limpieza) del «smartphone» a pesar de que estos sean resistentes al agua.
Apagarlo y desnudarlo

Lo primero es, según los expertos, apagar el dispositivo móvil desde el botón de encendido. Esta medida es necesaria ponerla en práctica de vez en cuando, y más teniendo en cuenta que se suele mantener activo continuamente. No como hace unos años cuando muchos usuarios lo apagaban cuando se iban a descansar cada noche. El siguiente paso, aunque obvio, es quitar todos los accesorios que tenga enchufado, ya sean cables de carga o auriculares. También, por supuesto, la funda protectora para “tener acceso completo a todo el terminal”.

Con una gamuza suave

Luego, toca iniciar el proceso de limpieza mediante un paño suave y sin pelusa. Una gamuza como la que se utiliza para limpiar las gafas. Apple, de hecho, recomienda un paño precisamente para las lentes correctoras, pero puede servir cualquier objeto textil similar, como microfibras. Lo importante es que no pueda rayar ni dañar el teléfono. Y que esté «ligeramente húmedo».