En la medicatura forense de Bello Monte, familiares de Leonardo Aníbal Cedeño Montero, revelaron que fue asesinado en el interior de su casa, en momentos que estaba durmiendo en su habitación, a eso de las 6:00 de la mañana del pasado lunes, residencia ubicada en el callejón de La Muerte, barrio El 70, parroquia Coche, municipio Libertador, al sureste del Distrito Capital.
La víctima laboraba como vigilante privado en la empresa Serenos Metropolitanos. Estaba encargado de custodiar una residencia en construcción ubicada en La Guaira. Salía de su casa a las 4:00 de la tarde y regresaba al siguiente día, luego de cumplir con su horario nocturno.
El pasado lunes, Leonardo Aníbal reposaba luego haber laborado. En el interior de la casa estaba su pareja, una cuñada y su marido. A eso de las 6:00 tocaron a la puerta y la cuñada de Cedeño Montero, apenas abrió la puerta recibió un empujón. Un sujeto ingresó con un arma de fuego y fue directo a la habitación donde dormía el vigilante.
El sereno recibió tres impactos de proyectiles: pecho, un costado y uno en el antebrazo. Familiares y vecinos lo auxiliaron. Cuando el hombre lo llevaban para ingresarlo en un auto, el autor de los disparos le propinaba cachazos en la cabeza.
Al herido lo trasladaron al Hospital Clínico Universitario, pero ingresó sin signos vitales. El cadáver, hasta este miércoles no había podido ser trasladado a la medicatura. Trascendió que el autor del homicidio es un sujeto apodado “El Chino”, integrante de una banda delictiva del sector El 70 de El Valle.
Leonardo Aníbal dejó una hija de 12 años, de una relación sentimental anterior. Era el segundo de dos hermanos.
“Esto es un pueblo sin ley. Los delincuentes tienen todo tipo de armamento. Esto parece la guerrilla colombiana. Lo mataron por gusto, porque le dio la gana”, expresó un allegado a la víctima que exigió, por razones de seguridad, no publicar su identidad.
UNA JOVEN MUJER
A eso de las 2:00 de la madruga de este miércoles, localizaron muerta, con un tiro en el pecho a una joven mujer, en la vía pública del kilómetro 2 de la carretera panamericana, cerca de la Panamericana.
Al principio algunas personas pensaban que la mujer había sido arrollada por un automóvil. Informaron del caso a la policía que al revisarla le notaron la perforación en el cuerpo producto del impacto de un proyectil.
La víctima no portaba documentación alguna. El cadáver lo ingresaron a la morgue de Bello Monte, donde un equipo de Inspecciones Oculares del Cicpc y una brigada de la División de Investigación de Homicidios iniciaron las investigaciones.
Efrén Pérez Hernández –el siglo-Caracas
