Nicolás Maduro, en el marco del «jueves productivo», convocó a los venezolanos a una jornada de movilización, el 10 de agosto, en rechazo a las sanciones impuestas por el Presidente de Estados Unidos, Donald Trump contra su gobierno.
Maduro indicó que durante la jornada de movilizaciones se firmará un documento contra las «medidas coercitivas unilaterales», que será enviado al secretario general de las Naciones Unidad, António Guterres, para exigir el respeto a la soberanía y la autodeterminación del país.
Durante su alocución, el mandatario venezolano informó que el Ejecutivo nacional trabaja de la mano con la empresa privada para la recuperación general de la capacidad productiva de la nación suramericana, en pro de desarrollar una economía diversificada, con la facultad para «afrontar cualquier prueba que le presente la economía mundial».
