Viena estrenará semáforos inteligentes

La ciudad pretende así acabar con el sistema de pulsación para cruzar las calles.

No hay peor sensación para un conductor que verse obligado a detenerse en una intersección sin que pase ningún auto o peatón, siendo obligado por los rigores de un semáforo.

Un agente de tráfico sin duda que permitiría el paso de vehículos o peatones si las condiciones lo permiten, y de esta manera se ahorrarían atascos, pero sobre todo, se reduciría el riesgo derivado de la impaciencia de algunos peatones.

Un sistema automatizado e inteligente que abra o cierre los semáforos en función de la necesidad del tráfico y los transeúntes parece la mejor solución y las autoridades de Viena han anunciado la puesta en marcha de un sistema de semáforos ‘inteligentes’ en 2020.

La concejalía de tráfico de la capital austriaca (Municipal Department 33) encargó a un equipo de investigadores del área de Visión Computerizada de la universidad TU Graz el desarrollo de una tecnología que agilizara el tráfico y redujera el riesgo de atropellosen la ciudad.

Hasta la fecha, las autoridades de movilidad de la urbe habían optado por algo que resulta ya muy familiar en otras ciudades, semáforos activados mediante pulsadores.

La idea, sobre el papel, parece perfecta, los semáforos permanecen con el disco en verde para los vehículos, y solo cambian a rojo si hay un peatón que lo activa para cruzar la calle.

Viena se dotó de esta manera, instalando más de doscientos pulsadores en respectivos semáforos, pero las autoridades no han tardado en encontrar las crecientes limitaciones a esta solución. La primera de ellas, la seguridad de los propios peatones, una vez pulsado el botón, se debe esperar a que el sistema active el verde cuando lo considere conveniente, un tiempo que no todo el mundo está dispuesto a esperar y se lanza a cruzar en rojo; las autoridades han detectado.