La leche líquida desapareció de las mesas de La Victoria

Para los victorianos otra cosa que quedó en el pasado fue acompañar sus meriendas y comidas con leche, esto debido a los altos costos que está experimentando este líquido nutritivo, en varios de los comercios del municipio Ribas, donde aún se pude conseguir.

Y es que la crisis que se vive actualmente en el país cada vez aleja más los alimentos de las mesas de los ciudadanos y la lactosa no escapa de la situación, obligando a más de uno ingeniársela para poder mantener una alimentación balanceada y rica en nutrientes.

No en todos los comercios se consigue el preciado lácteo

En este sentido, según lo establecido en Gaceta Oficial Nº 41.536, que salió a la luz el 3 de diciembre de 2018, el monto a pagar acordado es de 185,00 Bs.S. Sin embargo en los súper mercados, farmacias y panaderías se puede conseguir en 4 mil bolívares soberanos el litro, mientras que la presentación de 2 litros mantienen precios que oscila entre los 4500 y 5500 soberanos, dependiendo el lugar donde se adquiera.
Estas cifras exhibidas han conseguido que los consumidores pongan el “grito al cielo” y opten por sacar la leche de sus listas de compras, ya que según lo que ganan mensual o quincenalmente no les da la base, para darse ese lujo alimenticio y no obstante la calidad y las marcas no son las mismas.
“En mi familia estamos acostumbrados a desayunas y cenar con leche, pero esa tradición la hemos dejado atrás, porque hay que arroparse hasta donde llegue la cobija, es mejor gastar ese dinero en verduras que en este liquido que lo más que va a durar son dos días”, comentó Ivana Castañeda.
Carlos Camacho dijo: “Anteriormente yo compraba la leche líquida para acompañar cereales y café, porque me gustaba su sabor; ahora el cereal cuando puedo comprarlo lo como sólo y el café guayoyito, porque lo que gano no me da la base”.
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Por su parte, Oriana Bracamontes manifestó, que ella viven haciendo sacrificios para comprar la leche. “Me la paso caminando toda la ciudad en busca de leche, pero como está escaza o muy cara en polvo, me veo en la obligación de comprarla líquida, ya que con ella le preparo el tetero a mi niño y yo puedo estar mal alimentada, pero él nunca. Fácilmente mi quincena se me va en adquirir esto”.
Para finalizar, los victorianos coincidieron en la opinión de que aunque no pierden la esperanza de que haya una detención de precios, en vista de lo que se está viviendo ya no les sorprende otras alzas que atenten contra su bolsillo y más si se trata de la leche y sus derivados.
DANIEL MELLADO | elsiglo – La Victoria