Cada día se encuentra accesible para todos los usuarios. La expansión del gas natural está ampliando la red de distribución y cada vez más zonas tienen acceso.
En los hogares de nuestro país, principalmente en zonas urbanas y rurales, se utilizaba como fuentes de energía, el gas propano en balones, la energía eléctrica, el kerosene y otras fuentes de combustión. Pero hace ya unos años el escenario ha cambiado.
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El Consorcio Camisea ingresó a su fase de distribución y ya cuenta con el gas natural como una nueva fuente de energía. Uno de los lugares donde es más adquirido, es a nivel doméstico, y debido a su eficiencia y rentabilidad se emplea también en actividades comerciales, industriales y en la generación de energía eléctrica.
Alrededor de 450 mil hogares a nivel nacional cuentan con este servicio. De hecho, el número de familias que dispone de gas natural en sus domicilios está cada vez en aumento.
Entre los principales beneficios que este gas ofrece se pueden mencionar los siguientes:
–Es económico. Una familia que usa gas natural en casa puede llegar a ahorrar el 60% de su gasto mensual en energía.
–Es más seguro. El gas llega a través de una red de tuberías subterráneas con una presión muy baja y, por sus características, se disipa rápidamente en el ambiente ante un eventual escape.
–Es práctico. Dado que el gas natural llega forma continua por medio de tuberías, no se acaba como el tradicional balón de gas. Eso significa que no es necesario llamar o salir a comprar un balón de gas de recambio (adiós a eso de quedarse sin gas mientras cocinamos).
–Es más limpio. El gas natural produce menos hollín, por lo que tu cocina y las ollas no se ennegrecerán.
–Es cómodo para el usuario. Tu consumo se calcula con un medidor independiente y se paga mensualmente, como la luz, el agua o el teléfono. De esa manera puedes programar el pago con anticipación.
Se debe mencionar, además, que el gas natural no solo se emplea en la cocina. Esta fuente de energía puede emplearse, por ejemplo, para termas y en algunos casos para sistemas de aire acondicionado, secadoras de ropa, lavadoras, parrillas y otros artefactos que requieren calor. Cabe señalar, que este suministro es uno de los más económicos si se compara con otras energías.
En el Perú, la energía lo mueve todo, casi el 50% de esta potencia eléctrica se genera con el gas de Camisea. La introducción del gas natural en el mercado energético peruano no solo representa la presencia una opción beneficiosa para los consumidores locales, sino también la extensión de un sistema de producción eficiente y la masificación de una fuente de energía amigable con el medio ambiente.
