Los dramáticos secretos develados en una pirámide maya

En un antiguo templo-pirámide maya en Guatemala, un grupo de arqueólogos descubrió recientemente los huesos chamuscados de al menos cuatro adultos que probablemente eran miembros de un linaje real. Según una nueva investigación, la quema marcó una profanación deliberada y potencialmente pública de sus restos.

Los dramáticos secretos develados en una pirámide maya

Los huesos ofrecen una rara muestra de la destrucción intencional de cadáveres en la cultura maya para conmemorar un cambio político dramático.

Todos los restos pertenecían a adultos y los científicos identificaron a tres de los individuos como varones. Dos tenían entre 21 y 35 años, y uno entre 40 y 60 años, informaron los investigadores este jueves en la revista Antiquity.

Entre los huesos había miles de objetos quemados, enteros y en pedazos, como adornos corporales hechos de piedra verde (minerales verdes, incluido el jade), colgantes hechos con dientes de mamíferos, cuentas de concha, mosaicos y armas. Su riqueza y abundancia insinuaban el estatus real de las personas en la tumba.

Pero la quema de artefactos y restos era inusual para la realeza, al igual que su ubicación en esta cámara piramidal. La revelación exhibió el surgimiento de un nuevo tipo de líder que probablemente redefinió el poder durante una época de transformación social, dijeron los autores del estudio.

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Profanación ritual de huesos y adornos reales en la pirámide maya

Los científicos encontraron los huesos quemados y los objetos funerarios en 2022 en el fondo de una habitación abajo de un templo, debajo de un revoltijo de material de construcción.

El entierro yacía debajo de aproximadamente 1,5 metros (5 pies) de grandes bloques de piedra que normalmente se usan para la construcción de fachadas, una disposición inesperada para las personas de ascendencia real, dijo la autora principal del estudio, la doctora Christina Halperin, profesora asociada de antropología en la Universidad de Montreal.

Por lo general, las sociedades mayas mantenían los restos reales en espacios accesibles donde los visitantes pudieran realizar ofrendas. En comparación, esta cámara “no tiene todos los signos indicadores de lo que normalmente sería un entierro real”, dijo Halperin. “Simplemente lo arrojaron en este lugar. Y luego arrojaron todo el relleno de construcción encima”.

La contracción y deformación de los huesos carbonizados y rotos sugirieron que fueron quemados en un fuego masivo a una temperatura de más de 800 ºC (1.472 ºF). La datación por radiocarbono (que analiza las tasas de desintegración de los isótopos de carbono para determinar la edad de un objeto) mostró que la quema ocurrió entre el año 773 y 881.

Sin embargo, el análisis también reveló que las personas habían muerto décadas antes; posiblemente hasta un siglo antes de que se quemaran sus esqueletos, lo que indica que el fuego estaba relacionado con acontecimientos que se desarrollaron mucho después de sus muertes, escribieron los científicos.

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LC