Los mecánicos siguen preocupados por el alarmante bajo movimiento de servicio que han experimentado en los últimos meses, situación que los ha llevado a trabajar con dificultades, enfrentando una incertidumbre constante sobre el futuro de sus negocios.
Y es que según los testimonios de estos profesionales automotrices, los talleres de mecánica en la región han estado trabajando con las «uñas», lo que significa que apenas reciben suficiente clientela para cubrir los gastos básicos. Esto ha provocado una disminución significativa en los ingresos y ha generado dificultades financieras para estos establecimientos.
SERVICIOS AUTOMOTRICES
Al respecto, Francisco Ferreiro, indicó que, como prestadores de servicios automotrices, se enfrentan numerosos desafíos que han obstaculizado la capacidad de los talleres para ofrecer un servicio competitivo y asequible.
«El trabajo está sumamente flojo, sale muy poco, ya la cosa no es como antes. En ocasiones los vehículos se quedan mucho tiempo en los talleres porque los mismo dueños no tienen como cubrir los gatos de reparación», dijo.
FUTURO DE SUS NEGOCIOS
Esta situación ha generado una preocupación generalizada entre los mecánicos de la entidad, quienes temen por el futuro de sus negocios y la estabilidad económica de sus familias.
«Si no llega nada al taller, es semana muerta, hay que hacer malabares para poder llevar el sustento a nuestros hogares. De esto vivimos, esto es lo que hacemos pero si no llegan clientes nos las vemos difícil», aseveró Ferreiro.
«LA MECÁNICA YA NO ES NEGOCIO»
Por su parte, Ramón Niño aseguró que actualmente este oficio no es visto como un negocio lucrativo, sin embargo, no pierden la esperanza de que la situación mejore y puedan seguir llevando los alimentos a su hogar.
«Llevamos meses pasando roncha, algunos incluso años. Uno abre el negocio por costumbre, pero hay semanas que no llega nada, uno quiere trabajar, pero todo esto nos pone los ánimos por el piso», lamentó.
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Finalmente, recordó que la crisis económica que vive el país ha hecho que muchos talleres bajen su santamaría, por lo que necesitan el apoyo y la colaboración de las autoridades y de la comunidad en general para superar los desafíos actuales y asegurar un futuro próspero para sus negocios.
HERNÁN GONZÁLEZ | elsiglo
fotos | JOEL ZAPATA
