Trabajadores del sector público pidieron salarios justos

Médicos, profesores, jubilados y un grupo de representantes de trabajadores del sector público alzaron su voz al unísono este martes en la Inspectoría del Trabajo de Maracay, estado Aragua, donde exigieron a gritos un ajuste salarial y que les devuelvan los beneficios perdidos.
La actividad comenzó a las 9:00 de la mañana y se extendió en otras áreas del municipio Girardot y del territorio nacional, en la cual, los dirigentes gremiales y los dependientes del Estado, se estaban apegando al artículo 91 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, en donde establece que: «Todo trabajador o trabajadora tiene derecho a un salario suficiente que le permita vivir dignamente y cubrir para si y su familia las necesidades básicas».


En este sentido, Gladis Molina, representante del Sindicado Nacional de Empleados Públicos, aseguró que en la actualidad los trabajadores del sector público sólo perciben Bs. 7 al mes, si no tienen ningún grado o especialización académica.

Por tal motivo, Molina, quien habló también en representación de los trabajadores de la salud, pidió que se le de un ajuste salarial, porque a su criterio no pueden garantizarle la calidad de vida que merecen.

«Ya basta que los trabajadores de la salud cada día ganemos menos. Cada día nos alcance menos el dinero y nuestro poder adquisitivo está mermado», manifestó la dirigente sindical.

Asimismo, Molina acotó el esfuerzo de los sanitarios durante la pandemia, quienes están más expuestos a contagiarse de Covid-19, han dado la cara para cumplir con el país.

«Hemos batallado, luchado, hemos estado de la mano para cumplirle a este país, y a todas la necesidades que han surgido durante la pandemia, es justo que nos reconozcan ya y nos paguen el sueldo que nos merecemos», precisó Molina.

Al igual que sus colegas en Caracas, la representante del sector salud exigió a las autoridades del Ministerio de Salud para que tomen conciencia de que sus trabajadores necesitan cubrir las necesidades propias y la de sus familiares.

Acotó que los profesionales de este sector pueden ganar entre 30 a 40 bolívares a la quincena, y muchas veces ellos deben hacer turnos y horas extras para poder llevar un poquito más de dinero a sus hogares. «En el caso de las enfermeras, aparte de su jornada laboral, si trabaja de noche podrían ganar un total de 70 bolívares o 50 bolívares a la quincena», expresó.

Concluyó su intervención asegurando que los trabajadores de este sector deberían ganar como mínimo entre 100 a 130 dólares. Pero debido a los efectos de la inflación y la inestabilidad económica puede ser mucho más.

SALARIOS DE «HAMBRE»
El gremio educativo universitario también dijo presente en esta protesta colectiva de los trabajadores del sector público, en donde uno de sus representantes, profesor Niuman Páez, presidente de la Asociación de profesores del Pedagógico UPEL-Maracay, manifestó la necesidad de buscar la unidad para luchar por mejores condiciones laborales y salariales.

«El sector universitario acompaña esta jornada nacional de lucha de protesta del sector salud, a todos los sectores y gremios del país puesto que todos los trabajadores y dependientes de la administración pública, estamos siendo sometidos a paquetazo totalmente hambreador y contrario a lo que predica este farsante gobierno», expresó Páez.

Según a su juicio, el actual gobierno ha demostrado que no tiene voluntad de resolver y garantizar la calidad de vida de los trabajadores y del pueblo en general, por lo que pidió a la población para que los acompañe a esta causa.

«No es posible que el ciudadano Presidente de la República, quien ostenta a decir ser un dirigente obrero supuestamente, salga en cadena nacional diciendo que va a unificar aún más los esfuerzos del sector público. Además de todo esto, este Gobierno ha destruido las instituciones de producción social del sector público, de la educación, médicos y enfermeras», comentó Páez, siendo enfático de que los hospitales no tienen los insumos necesarios para cubrir una emergencia médica.

Por su parte, la profesora Liliana García, vocera de Alianza Social de Trabajadores de Aragua (ASTA), relató que desde hace años, a los educadores les descuentan de su salario un porcentaje para la HCM, pero cuando necesitan de ella, los funcionarios competentes aseguran que no cuentan con este beneficio.

«No aparece y cuando vamos a hacer uso de él, no contamos con ese recurso, entonces a dónde va todo ese dinero, es una buena pregunta porque no va a los educadores ni sus familiares», dijo la dirigente.

Por tal motivo, aseveró que por esta razón, el gremio educativo ha estado durante 4 años en la calle protestando por sus derechos, pero que no han sido escuchados. «Ahora todo los gremios no estamos uniendo porque la lucha es una sola, y en esa función vamos todos», afirmó García.

NI PARA LA MEDICINA ALCANZA LA PENSIÓN
Siguiendo este orden de ideas, el profesor Teodomiro Aguilar, presidente de la Asociación Civil de Educadores, Jubilados y Pensionados Unidos del estado Aragua, afirmó que es necesario el acompañamiento de los adultos mayores en esta protesta, ya que también les incumbe que les aumenten la pensión, que actualmente es de Bs. 7.

«Estamos expresando el apoyo y la solidaridad, que es el auto-apoyo y la solidaridad que debemos tener con nosotros mismos, en cuanto a todos los trabajadores del país. También estamos sufriendo la mismas consecuencias de la aplicación de una medidas económicas que afectan el bolsillo de los trabajadores y particularmente a los educadores jubilados y pensionados que hoy representa una vergüenza desde el punto de vista salarial», argumentó.

Aguilar aseguró que la pensión no les da ni siquiera para comprar la medicina que requieren, exigiendo un aumento salarial en general, con el fin de que toda la población pueda cubrir sus necesidades básicas elementales.

«Por ello este grito de rebeldía es para decirle al Gobierno que asuma su responsabilidad con los trabajadores que han dado parte de su vida en el ejercicio profesional y que hoy reclamamos vivir nuestra vejez con dignidad», sentenció en su intervención.

MALTRATO AL VENEZOLANO Y UN LLAMADO A OPONERSE
Robert Vargas, representante de la Central de Trabajadores y Trabajadoras Alianza Social Independiente de Venezuela (ASI), reforzó lo que denunciaba Aguilar, aclarando que en la actualidad ningún venezolano puede vivir con un salario y una pensión mensual de Bs. 7.

«No se puede vivir en un país donde la canasta alimentaria ronda los 480 dólares y la canasta básica supera los 500», añadió.
Por tal motivo, el dirigente sindical exhortó a las autoridades nacionales a que revisen las políticas sociales y laborales, que según a su juicio están maltratando al ciudadano común.

Para finalizar, Raúl Maldonado, secretario General de la Federación de Trabajadores del estado Aragua (Fetraragua), precisó que debido a las políticas del Gobierno que asfixia el poder adquisitivo de los trabajadores, no encontró una alternativa que salir a la calle a protestar, ya que esta situación no la aguantamos más.

Por esta razón y en nombre de Fetraragua invitó al pueblo en general que salgan a las calles y rechacen las medidas económicas de este Gobierno, que según aseguró asfixia al pueblo y que en vez de resolver la crisis lo que hace es profundizarla, sentenció.

LINO HIDALGO | elsiglo