La imagen de un Blake Snell cargado de frustración por la manera como el manejador de los Rays de Tampa Bay, Kevin Cash, lo sacó del montículo en el Sexto Partido de la pasada Serie Mundial cuando mejor estaba lanzado ya forma parte de la historia, como la de este martes convertido en la nueva estrella de los Padres de San Diego.
El equipo californiano de la Liga Nacional cerró su traspaso con los Rays por cuatro jóvenes promesas.
Snell, ganador del Premio Cy Young de la Liga Americana en el 2018, permitirá a los Rays recibir a los derechos, el colombiano Luis Patiño, y Cole Wilcox, además de los receptores, el dominicano Francisco Mejía, y Blake Hunt, formados en el sistema de ligas menores de los Padres durante varios años.
Mientras que los Padres lograron a un lanzador de 28 años con experiencia en Serie Mundial que puede darles una gran ayuda al lado de toleteros dominicanos Fernando Tatis Jr. y Manny Machado.
Snell le da a los ascendentes Padres un as establecido al frente de la rotación mientras intentan atrapar a Los Ángeles Dodgers en la División Oeste de la Liga Nacional.
San Diego también está a punto de adquirir al abridor de los Cachorros de Chicago, el japonés Yu Darvish, junto con el receptor puertorriqueño Víctor Carati.
Snell tuvo marca de 4-1 con efectividad de 3.24 en 11 aperturas durante la temporada regular 2020 acortada por la pandemia del coronavirus, luego tuvo marca de 2-2 con efectividad de 3.03 en seis aperturas de postemporada para los campeones de la Liga Americana.
Lanzó espectacularmente hasta la sexta entrada del Juego 6 de la Serie Mundial contra los Dodgers, antes de que Cash lo sacara después de 73 lanzamientos.
El movimiento fue todo un «fracaso» con el que Cash tendrá que cargar el resto de su carrera profesional, porque el cambio permitió que los Dodgers remontasen para una victoria de 3-1 que aseguró la Serie Mundial, aunque Snell apoyó la decisión de su exmanejador y reiteró este martes ese apoyo.
Snell, que dijo estar algo triste por dejar Tampa Bay, también anticipó que los Rays lo cambiarían antes de que expirara su contrato, ya que era poco probable que no lo renovasen, pero no esperaba que el cambio se diese tan rápido.
Su nuevo equipo tiene una plantilla con jóvenes talentos encabezados por Tatis Jr. y Machado, imparables en su ofensiva, que les permitió acabar la reducida temporada con marca ganadora de 37-23, la segunda mejor de la Liga Nacional, seis menos que los Dodgers, y disputaron los playoffs por primera vez desde el 2006.
A pesar que su rotación no fue la mejor cuando llegaron los playoffs, los Padres superaron en la primera ronda a los Cardenales de San Luis y perdieron la serie divisional ante los Dodgers (0-3).
Los Padres tienen también al estelar Mike Clevinger, conseguido el pasado agosto de los Indios de Cleveland, pero no se espera que esté listo hasta la temporada del 2022 tras someterse a la delicada operación de Tommy John.
Mientras el dominicano Dinelson Lamet, Zach Davies y Chris Paddack son abridores de calidad. El zurdo MacKenzie Gore es uno de los mejores lanzadores potenciales del béisbol, la joya en la formación de jóvenes valores de los Padres.
Entre todos los abridores zurdos en las Ligas Mayores el año pasado, Snell ocupó el primer lugar en porcentaje de ponches (31%) y el sexto en efectividad.
A Snell le quedan tres años y 39 millones de dólares en un contrato de 50 millones y cinco temporadas que firmó con los Rays en marzo del 2019.
Le deben 10,5 millones de dólares el próximo año, 12,5 millones en el 2022 y 16 millones en 2023, un salario de auténtico saldo, por la clase que posee como lanzador y en comparación con lo que cobran otros en las Mayores con una producción mucho más baja.
Patiño podría competir para ocupar el puesto vacante de Snell en la rotación de Tampa Bay en el 2021. El colombiano de 21 años se encuentra entre las mejores promesas de pitcheo en el béisbol con una recta dura y un slider plus.
El lanzador cafetero hizo su debut en las Grandes Ligas en el 2020 con 10 apariciones como relevista y una apertura, con marca de 1-0 con efectividad de 5.19. Ponchó a 21, pero caminó a 14 en 17 1/3 entradas.
Mejía, de 25 años, se convirtió en el receptor principal de San Diego durante la temporada 2019, cuando bateó para .265 con ocho cuadrangulares en 79 partidos.
Una lesión en el pulgar izquierdo lo limitó a 17 partidos en el 2020. Mejía ha estado entre los receptores jóvenes más prometedores del juego desde que fue noticia con una racha de 50 partidos dando de hits en las ligas menores, aunque hay dudas en su juego defensivo.